Ana Markovic, es considerada por varios medios europeos, como la jugador más sexy del mundo. Algo que a la propia deportista, no le sienta nada bien, ya que menciona que le trae repercusiones en su ámbito personal.

La jugadora croata, que juega en el Grasshoppers de Suiza, Ana Markovic, es una de las grandes ´joyitas´ que tiene ese país en el fútbol femenino. La delantera no tan solo ha hecho noticia por su actuaciones como atacante del elenco helvético, si no que además, por su belleza.

Resulta, que la joven de 22 años, es catalogada como la jugadora “más sexy del mundo”. Algo, que a ella no le parece correcto, debido a que muchas veces ha comentado, que le ha traído repercusiones aquel título.

En conversaciones con el medio alemán, 20min, la delantera menciona que no se ha sentido cómoda con su “apodo”. En el dialogo, la artillera señaló: “Me gustaban los artículos que me llamaban la futbolista más guapa o una de las más guapas porque me alegra saber que soy guapa”.

“Pero luego aparecieron notas en los periódicos en los que me describían como la futbolista más sexy. No me gustó eso. También por mi familia. Creo que hay que tener cuidado con lo que se escribe sobre la gente, sobre todo si no la conoces”, señaló la joven europea.

Desde sus inicios en el deporte, ha tenido una serie de problemas, ya que considera que solo se le valora, por su características físicas y no por su talento dentro de la cancha.

Con relación a esto la joven comentó que “mucha gente me escribió y pretendió ser una especie de manager, pero sé exactamente lo que quieren de mí. Nunca me han visto jugar al fútbol y sólo se fijan en mi aspecto. Creo que es una verdadera lástima”.

Sin embargo, su selección nacional, si ha hecho gala de su talento como jugadora, ya que prácticamente, la han protegido del acecho de terceros. Es así, que Markovic expresó: “Todo ha ido bien con la selección nacional. Me hicieron sentir profesional, estudiaron mis logros futbolísticos a través de videos de YouTube”.

“Cuando estaba con la selección nacional, de repente unos 25 periodistas querían verme para entrevistarme en el hotel del equipo. Entonces la asociación intervino para que pudiera concentrarme en el fútbol”, finalizó la “11” croata.