A través de una entrevista en exclusiva replicada por las redes sociales de su club, el delantero del Blackpool, Jake Daniels, decidió declararse abiertamente homosexual.
Este lunes, el delantero del Blackpool de la Championship de Inglaterra, Jake Daniels, se convirtió en el primer futbolista profesional británico que ha declarado abiertamente que es homosexual en las últimas tres décadas.
El jugador, que con 17 años firmó su primer contrato el pasado febrero, afirmó a la cadena Sky News que “este era el momento adecuado para hacerlo” y agradeció el respaldo que ha recibido del club y sus compañeros.
“Durante mucho tiempo pensé que tendría que esconder la verdad porque quería ser, y de hecho ahora lo soy, futbolista profesional. Me preguntaba a mí mismo si no debería esperar a retirarme para salir del armario, porque ningún otro futbolista profesional aquí ha salido”, explicó Daniels.
“Sin embargo, sabía que eso significaba mentir durante mucho tiempo y no poder ser yo mismo ni vivir la vida que quiero”, argumentó.
Cabe consignar que antes que él, en 1990, Justin Fashanu, futbolista del Norwich y Manchester City, admitió en exclusiva al tabloide The Sun que era gay tras enterarse de que un diario estaba a punto de publicarlo, generando una negativa repercusión en su carrera.
No obstante, Daniels afirmó que tras “haberlo estado pensando durante largo tiempo”, ha decidido que quiere “ser libre” y que la gente conozca su “verdadero yo”.
“Desde que se lo he contado a mi familia, mi club y mis compañeros, el periodo de darle demasiadas vueltas y de estrés se ha evaporado. Estaba afectando a mi salud mental. Ahora simplemente me siento confiado y feliz de ser finalmente yo mismo”, relató.
“Mis compañeros de equipo han sido un gran respaldo, todos me han apoyado. Me han hecho un montón de preguntas, han estado muy interesados y su reacción ha sido fantástica. Es lo mejor que podría haber deseado”, agregó Daniels.
El delantero admitió, además, que la homosexualidad es todavía un “tabú” en los vestuarios profesionales.
En ese sentido, sostuvo: “Por supuesto, soy consciente de que habrá una reacción a esto y que en parte será homofóbica, quizás en algún estadio o en las redes sociales. Es un objetivo fácil”.
“Pero lo veo de la siguiente manera; estoy jugando al fútbol y ellos están gritando, pero ellos también pagando para verme y yo vivo mi vida ganando dinero gracias a eso. Así que pueden gritar cuanto quieran”, recalcó.
