Este domingo, el Liverpool ganó en Elland Road al Leeds United (0-3) para mantener el pulso con el Manchester United y el Chelsea por la cima de la Premier League, pero perdió al joven Harvey Elliot, lesionado de gravedad de su tobillo a la hora de partido.

El elenco ‘red’ no flojea, consiguiendo tres triunfos y un empate en los cuatro encuentros que se han disputado de la temporada 21-22 del fútbol inglés, lo que los posiciona en el tercer lugar de la tabla, igualados de puntos con Manchester United y Chelsea.

El conjunto de Jurgen Klopp impuso un alto ritmo que no pudo seguir la escuadra que dirige Marcelo Bielsa, que vive su peor época en Elland Road. No ha ganado aún en lo que va de curso. Lleva dos derrotas y dos empates. Sólo ha anotado un gol.

El Liverpool pudo lograr una victoria más abultada, pero la falta de acierto lo impidió. Y eso que la última media hora jugó con un futbolista más por la expulsión del neerlandés Pascal Struijk.

El conjunto visitante encarriló el encuentro a los veinte minutos con un gol de Mohamed Salah tras pase de Trent Alexander Arnold. El egipcio tuvo ocasiones para marcar más goles y también Sadio Mane. Mientras que el segundo tanto llegó en el minuto 50. La zaga local quedó en evidencia. Alexander Arnold lanzó un córner y el balón se paseó por el área. En un rechace, apareció Fabinho, que batió otra vez a Illan Meslier.

Después llegó la preocupación sobre el césped cuando Harvey Elliot fue trabado desde atrás por Struijk. Uno de los tobillos del joven jugador ‘red’, una de las revelaciones de la temporada, se fracturó. Desde el principio la alarma surgió en el terreno de juego. Fue atendido rápidamente durante unos minutos y después fue llevado en camilla a los vestuarios. Struijk fue expulsado con roja directa y Elliot sustituido.

El Liverpool arrinconó al Leeds y las ocasiones de gol se multiplicaron. La insistencia llevó al 0-3 a los visitantes y en una acción del español Thiago Alcántara, el senegalés Sadio Mané recuperó el acierto y redondeó el triunfo.