Minuto 24 del segundo tiempo en el Estadio Maracaná y Brasil vencía por la cuenta mínima a Chile. Era el 3 de septiembre de 1989 y la Roja se estaba jugando la clasificación para el Mundial de Italia 1990.

Fue entonces que una bengala cayó en el campo de juego, cerca del Cóndor Rojas, dando inicio al mayor escándalo en la historia del fútbol chileno. El caos se apoderó del Estadio y todo el ambiente de ‘guerra’ que se había armado en la previa por la prensa de ambos países comenzaba a ser una realidad.

Un Rojas cubierto de sangre, en camilla y escoltado por toda la delegación chilena abandonaba el recinto deportivo. Ambiente de luto en el país de la samba. Con una generación donde destacaban jugadores como Branco, Careca y Bebeto, y a sabiendas de las duras sanciones que podría recibir, la gente ya se despedía del mundial.

Entre la multitud , una joven de 24 años trataba de esconderse, estaba asustada y no entendía lo que estaba sucediendo. Era la primera vez que asistía al Maracaná y entre la emoción que provocaba el partido recibió una bengala de un grupo de fanáticos y no dudo en prenderla para aportar a la fiesta.

En cuestión de minutos, la policía dio con la presunta responsable. Se trataba de Rosenery Mello do Nascimento Barcelos da Silva, quien estuvo por un día retenida por la policía. Al enfrentarse con los medios reconocía entre lágrimas que ‘fue sin querer’.

Fueron días de incertidumbre , donde sin duda que la joven madre en ese entonces de un niño de 10 meses era la persona más odiada de Brasil. Sin embargo, aclarada la situación su vida dio un radical vuelco y se convirtió en toda una celebridad.

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“El minuto de fama con Playboy y un triste final”

La ‘Fogueteira del Maracaná’, como empezó a ser reconocida, pasó por varios canales de televisión, incluso por uno chileno, donde señaló que “Tengo la consciencia tranquila, quizás antes le hubiese pedido perdón a Rojas porque no sabía lo que estaba pasando”.

Sin embargo, el llamado de la fama tocaría su puerta meses después con una propuesta que no dudó en rechazar. La revista Playboy la quería para su portada y le ofreció una exorbitante suma de 40 mil dólares. Sin pensarlo dos veces, aceptó y para la edición de noviembre salió en primera plana bajo el título de “La desnudez y la gracia de la cohetera del Maracaná”.

Fue todo un éxito pero como pasa en muchos casos, la ‘Fogueteira’ no pudo con el peso de ser una celebridad y dilapidó todo su dinero en viajes sin lograr asegurar su futuro.

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Años después, esta hincha del Fluminense reconoció que no supo manejar la fama y aprovechar las oportunidades que se le presentaron. Así fue como según informó La Cuarta “Terminó separándose del marido y se trasladó de Rio de Janeiro a Brasilia, donde instaló puestos de hot dogs en la calle, negocio que no le rindió demasiado”.

La peor noticia llegaría el 5 de julio del 2011. A la edad de 45 años, Rosenery falleció producto de un aneurisma cerebral en el Hospital Naval Marcilio Días, en Río de Janeiro. En ese momento tenía tres hijos (Vander, Gabriel y Junior) y era propietaria de un bar.

De aquella joven inocente que alcanzó la fama de forma repentina quedaba muy poco. En Chile, varios medios cubrieron la noticia de la que en un principio se transformó en enemiga del país pero que con el pasar de los días fue solo un actor más de uno de los episodios más recordados del fútbol chileno.

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