Tras derrotar en un intenso duelo al Monterrey por 2-1, el Liverpool logró clasificar a la final del Mundial de Clubes que se está disputando en Catar.

El actual campeón de la Champions League debió extremar recursos para llegar a la definición ante el Flamengo, en un partido donde también se hizo presente la ‘pierna fuerte’.

El árbitro chileno Roberto Tobar fue el encargado de impartir justicia cumpliendo un correcto cometido. En total mostró cinco tarjetas amarillas : tres a jugadores y dos a los directores técnicos, Jurgen Klopp y Antonio Mohamed, quienes protagonizaron un tenso cruce durante el segundo tiempo.

Sin embargo, no todos quedaron conformes con el rendimiento de Tobar. Mohamed Salah, delantero y una de las figuras de los ‘reds’, se quejó por la gran cantidad de faltas sin sancionar.

En conferencia de prensa, el egipcio señaló que “pienso que fue un partido muy duro. fueron muy agresivos contra nosotros y todos nos preocupamos por nuestras piernas. Fueron muy agresivos. El árbitro no nos protegió demasiado, pero no estoy aquí para quejarme”.

Cabe destacar que la gran final del torneo entre Liverpool y Flamengo se disputará este sábado desde las 14:30 horas.