"Yo esa vez lo abandoné": Carla Ballero cuenta episodios de celos de su hermano Álvaro con su esposa

Carla Ballero habló sobre el duro momento por el que pasa su hermano Álvaro, quien hace algunos meses se separó de su esposa Ludmila Ksenofontova, tras 17 años de relación y una serie crisis económica.

La ex Morandé de Compañía fue invitada al programa ‘Hay que decirlo’ de Canal 13, donde comentó que Ludmila está tranquila y destacó que Álvaro está aceptando los hechos que llevaron a la separación.

“Ella está muy tranquila y le pasa lo mismo yo creo que a todos nosotros. Ve a una persona (Álvaro) como más clara, con mucha pena, pero clara, y como por primera vez, aceptando los hechos”, aseguró.

Pero igualmente sinceró que “en este momento yo veo una relación quebrada, quebradísima”.

Otro punto que tocó Carla Ballero, fue el tema de los celos por parte de Álvaro, quien muchas veces negaba esta situación, pero que a ella misma le tocó presenciar.

“Yo lo mandé a llamar, él nunca lo había contado, de hecho nunca lo había aceptado con nosotros, o sea, en familia. Él lo negaba, como que no, ‘yo no soy celoso y en esto tengo razón"”, sostuvo.

Carla Ballero cuenta que no es que Álvaro sintiera celos por un hombre en particular, sino que cualquier situación lo hacía reaccionar, aunque no tuviese sentido.

“Él vivió dos situaciones muy críticas de celos, que las contó, por eso me permito decirlo hoy. En una de ellas estuvieron muy al borde, o sea Ludmilla ni siquiera trabaja, era toda una psicopatía, una locura total. No, yo ahí de verdad que esa vez lo abandoné, o sea, yo no fui capaz”, añadió.

De acuerdo a Carla Ballero, el hecho que causó un quiebre en Álvaro fue su despido hace 3 años de Canal 13, donde ejercía un cargo ejecutivo, algo que también afectó su situación económica.

“Cuando él perdió la pega, él nunca pensó que le iba a pasar eso. Y cuando le pasa eso y sale del canal, como que no solo se inseguriza, él pierde lo que para él es la seguridad, que es el tema”, señaló.

Un despido que también lo afectó en el plano económico y su comportamiento diario.

“Él nunca sentía la tranquilidad, no importa lo que tuviese, él no la sentía. Porque eso es un estado, eso tiene que ver con una personalidad, con una personalidad exitista, siempre quería más”, comentó.