A Nicolás Massú solo le faltó saltar a la cancha para apoyar a su pupilo Dominic Thiem, quien en más de cuatro horas se quedó con el título del US Open tras derrotar a Alexander Zverev.

Durante todo el partido Massú estuvo alentando al austriaco. De hecho, se podía escuchar en la transmisión como el chileno le cantaba los puntos al austriaco.

Prueba de su energía y emoción se demostró cuando Thiem se coronó campeón. Las cámaras de la transmisión captaron en la galería como Massú saltó de la euforia y festejó el título de su pupilo.

Señalar que Dominic Thiem ganó el primer Grand Slam de su carrera, tras vencer al alemán por parciales de 2-6, 4-6, 6-4, 6-3 y 7-6 (8/6) en cuatro horas y un minuto de juego sobre la pista principal de Flushing Meadows (Nueva York), sin público en las gradas por culpa del coronavirus.

Un triunfo que consolida la relación entre el austriaco y el doble campeón olímpico en Atenas 2004, que comenzó en mayo del año pasado. Massú le ha impregnado fuerza, concentración en los momentos importantes de los partidos y su particular garra.