El juicio entre la estrella de los Wallabies Israel Folau, despedido en mayo por comentarios homófobos, y la Federación Australiana de rugby se celebrará en febrero, a menos que las dos partes lleguen a un acuerdo antes, anunció este martes la justicia australiana.

Tras el fracaso en junio de un primer intento de mediación, Folau, que impugna la rescisión de su contrato, anunció el 1 de agosto que demandaba a la federación por despido improcedente.

Este martes, un juez de la Corte Federal Australiana ordenó a las dos partes retomar las conversaciones de aquí al próximo 13 de diciembre. Si no se llega a ningún acuerdo, se celebrará un juicio a partir del 4 de febrero que podría durar entre tres y cinco días.

Esta decisión evita que los Wallabies afronten un juicio de gran envergadura en plena Copa del Mundo de rugby (del 20 de septiembre al 2 de noviembre).

Ferviente cristiano evangélico de 30 años y 73 veces internacional con los Wallabies, Folau provocó indignación a mediados de abril cuando publicó un mensaje en su cuenta Instagram que decía: “Borrachos, homosexuales, adúlteros, mentirosos, fornicadores, ladrones, ateos, idólatras… El infierno los espera. ¡Arrepiéntanse! Sólo Jesús puede salvarlos”.

La Federación Australiana de Rugby (RA) decidió rescindir su contrato, lo que el jugador rechazó. Pero la comisión de disciplina de la RA decidió despedirlo a finales de mayo, poniendo así fin a la carrera del jugador con los Wallabies y en Australia.

Folau rechaza la validez de su despido, apoyándose en un artículo del Código Laboral australiano que prohíbe todo despido por motivos religiosos.

RA hace valer que el despido de Folau es puramente contractual, explicando que el jugador se comprometió a no denigrar más a nadie por su orientación sexual, luego de un primer escándalo que provocó el año anterior.