Hace unos meses, la trabajadora presentó una acusación dentro de la propia escudería por "comportamiento inadecuada" de su jefe; Christian Horner.

Tras verse envuelto en una complicada acusación por “conducta inapropiada” de una de sus propias trabajadoras, el jefe de Red Bull, Christian Horner, y la mesa directiva de la escudería, decidieron suspender de sus actividades a la mujer afectada.

De acuerdo a la BBC, y pese a que el equipo lo absolviera de las acusaciones tras una investigación de ocho semanas, la escudería austríaca decidió ‘poner en la nevera’ a la empleada, a quien ya no le habían permitido viajar a Bahréin para “evitar un circo”.

Pese a toda la controversia que se ha levantado en la escuadra encabezada por Max Verstappen, Horner seguirá al mando como director general. Una decisión que no tiene conforme al padre del piloto neerlandés, quien ya ha amenazado con que su hijo podría dejar Red Bull.

Por el momento, ni Horner ni la escudería se han referido al respecto ni al correo con abundantes conversaciones e imágenes que exponen al mandamás del equipo.