Luego del polémico Gran Premio de Hungría, que dejó como sorpresivo ganador a Esteban Ocon (Alpine), el piloto británico Lewis Hamilton encendió las alarmas en la Fórmula 1 tras revelar que sigue sufriendo por las secuelas del Covid-19.

El multicampeón reveló que fue examinado por un médico al término de una carrera intensa que le causó una sensación de intensa fatiga, que ligó al contagio sufrido en 2020.

Hamilton, quien recuperara el liderato del Mundial, luego de su tercera posición detrás de Esteban Ocon y Sebastian Vettel en Hungaroring, no iba a participar en un principio en la conferencia de prensa de los tres primeros puestos porque estaba viendo al médico.

“Estoy bien. Sí, tuve vértigos reales y todo se hizo un poco borroso en el podio”, reaccionó con voz débil una vez llegó a la conferencia de prensa. “He luchado todo el año para estar con buena salud luego de lo que pasó a finales del año pasado. Es una verdadera batalla”, agregó.

Contagiado de Coronavirus luego de su victoria en Baréin a finales de noviembre de 2020, Hamilton se perdió el Gran Premio siguiente, en el mismo circuito de Sakhir, e indicó haber pasado “una de las semanas más duras en mucho tiempo”.

Ocho meses después, el piloto de Mercedes se mostró con problemas de vértigo al salir de su monoplaza y con claras dificultades para mantenerse en pie.

Ante la pregunta si correspondía a un Covid-19 persistente, el británico señaló que a pesar de no hablarlo con un especialista, tenía la impresión de que efectivamente lo era. “¿Quién sabe lo que es hoy? Quizá es un problema de hidratación, no lo sé, pero nunca tuve esta experiencia antes. Viví algo similar en Silverstone (hace 15 días), pero esto fue bastante peor”, sentenció.

Este martes, el primer lugar del Mundial tranquilizó a sus seguidores al publicar un video en sus redes sociales sobre una bicicleta fija. “Los entrenamientos de verano comienzan. ¡Vamos! Trabajando, aunque no hay nada que no podamos hacer”, escribió el competidor de 36 años, mostrando que se mantiene en forma y se sigue recuperando de estos malestares que encienden las alarmas en la F1.