El deporte de Estados Unidos enfrenta un nuevo escándalo. Dos gimnastas demandaron a USA Gymnastics (Federación) y al Centro para la Seguridad Deportiva de ese país (SafeSport), acusando que ambos organismos fallaron para protegerlas de su entrenador Sean Gardner, al que denunciaron de abuso sexual.
Las demandantes, actualmente universitarias, aseguran que fueron atacadas sexualmente por el director técnico cuando tenían 11 y 12 años, en 2018, en Chow’s Gymnastics & Dance Studio (Iowa), detalla Daily Mail.
Las mujeres remarcan en su acción judicial que “soñaban con competir algún día en los Juegos Olímpicos” y que fueron sometidas a “abuso físico, emocional y sexual, acoso y molestias”, algo que les sigue afectando.
Se trata de las primeras causas civiles contra Gardner luego de su arresto en agosto de este año, por causa de una serie de informes de prensa donde se exponían abusos.
Las involucradas se quejan de USA Gymnastics y SafeSport, remarcando que, a la luz de los antecedentes, existía información suficiente para haber apartado antes a Gardner y ellas no haberlo conocido. Es decir, no fueron protegidas.
“Lo que hizo fue profundamente perverso y lo dejaron hacerlo”, afirmó el abogado californiano John Manly, quien representó a las víctimas de Nassar y forma parte del equipo legal que presentó los casos de Iowa.
“En mi opinión, esto ilustra que la cultura del dinero y las medallas por encima de la seguridad infantil sigue vigente en USA Gymnastics y el sistema olímpico”, agregó.
A favor de las gimnastas, los padres de una tercera deportiva habían presentado informes a las autoridades en 2017, alegando que Gardner exigía a sus dirigidas que le dieran besos y largos abrazos después de cada entrenamiento y que, incluso, una vez, expulsó a una que se negó a hacerlo.
Sean Gardner ya enfrentaba cargos por pornografía infantil
El caso de Gardner, para muchos en ‘Larry Nassar 2.0’, ha tomado mayor fuerza en las últimas semanas con las nuevas demandas en su contra.
Y es que el entrenador ya enfrentaba cargos federales de pornografía infantil, por supuestamente colocar una cámara oculta en el baño del club que dirigía, en Mississippi, entre diciembre de 2017 y abril de 2018, para grabar a sus estudiantes.
A Gardner se le acusa de crear videos con imágenes de cerca de al menos 10 menores desnudos o desvistiéndose, las que las autoridades recuperaron de sus computadoras en 2024 mientras investigaban informes de abuso sexual.
Por este hecho, pese a las pruebas, Gardner se declaró inocente y actualmente se encuentra en prisión preventiva. Está previsto que enfrente la justicia el próximo mes.
Según los medios internacionales, se esperan que otras gimnastas sumen demandas en los próximos días.
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