De acuerdo a lo indicado, "Los 16 de Chile" es un proyecto que tiene por objetivo construir refugios con identidad local en cada región, involucrando al mismo tiempo a los clubes de montaña que serán esenciales para el desarrollo de la iniciativa.
El 5 de febrero es una fecha que caló hondo en el corazón de familiares, amigos, conocidos y compañeros de profesión del montañista chileno, Juan Pablo Mohr.
Y es que ese día el deportista desapareció mientras escalaba el monte K2, en Pakistán, junto a John Snorri y Ali Sadpara, siendo encontrado sin vida algunos meses después y tras una intensa búsqueda.
Hoy, y lejos de la pena de aquellos días grises, los miembros de su fundación “DeporteLibre” anunciaron luz verde para un proyecto que seguirá con su legado y que servirá para homenajearlo a lo largo de todo el país.
Se trata de “Los 16 de Chile”, iniciativa que tiene por objetivo construir en cada una de las cumbres más altas de cada región un refugio para permitir un mejor acceso a nuestra cordillera y potenciar así la cultura de montaña en Chile.
BiobioChile se contactó con Enrique Luco, otro de los fundadores de la Fundación DeporteLibre, quien entregó más detalles sobre la iniciativa que además tiene contemplada otras dos acciones para trabajar en conjunto con las comunidades de cada región.
“El proyecto de los 16 era una idea que Juan Pablo Mohr estaba llevando a título personal, pero cuando pasó su accidente en el K2 de los Himalayas la fundación se hizo cargo y los auspiciadores de Juan Pablo tomaron la iniciativa de tomar parte de su legado que era crear cultura de montaña en Chile”, partió señalando Luco.
“Él quería que se mejoraran los caminos hacia las montañas y que hubiese más difusión para que así la gente se animara a hacer montañismo, senderismo y escalada. Hoy el proyecto está siendo ejecutado en el sector Valle Tronador de la región de Los Lagos, por ser la cumbre más alta de aquí, y estamos en etapa de diseño inicial”, agregó.
Junto a eso, el profesional indicó que la Fundación no solo trabajará en el diseño y arquitectura de los refugios, sino que además implementará tres programas diferentes en la zona: Montaña Libre, Patio Libre y Plaza Libre.
El primero involucra el proceso de construcción de los refugios de montaña y administración; el segundo la intervención de un centro educativo para potenciar a temprana edad la participación en deportes de montaña; y el tercero trabajará en un espacio público para impulsar la práctica de deportes de montaña de forma responsable y segura.
“Decidimos partir este proyecto en la región de Los Lagos porque Juan Pablo tenía familia aquí y él ya había empezado con las gestiones. Estaba muy comprometido y motivado. De momento nosotros ya terminamos la etapa de diagnóstico y vinculación con los locales, además de firmar un convenio con la I. Municipalidad de Puerto Varas y con el Servicio local de educación pública Llanquihue”, comentó.
“La primera comunidad a intervenir de forma deportiva será la Escuela Epson de Ensenada, donde ya diseñamos todo en conjunto con su comunidad educativa, además de una plaza de la misma localidad. En ese sentido ya tenemos listo el diseño de lo que se hará, el cual fue conversado y diseñado en conjunto con los habitantes de allí”, añadió.
Consultado por la duración de este proyecto, el socio de la Fundación comentó que se trabajará un proyecto por año y que luego de inaugurar el refugio en monte Tronador, se desplazarán hasta la región Metropolitana para intervenir el Tupungato.
“Ahora mismo nosotros venimos llegando de una expedición en que conocimos el lugar exacto que Juan Pablo marcó para que se construyera el refugio. Hicimos análisis y en diciembre comienza el trabajo colaborativo con las comunidades de montaña. Estimamos que la construcción de este primer refugio debería estar finiquitada a finales de abril. Luego, una vez que terminemos todo acá, nos vamos a la montaña Tupungato para dar inicio al segundo refugió”, añadió.
“Me gustaría dejar en claro que si bien nosotros iremos avanzando de región en región no nos desligaremos de las comunidades. La idea de todo esto es potenciar el turismo local, ya que la montaña es un recurso natural que el turismo puede potenciar muy bien de manera sustentable. Por eso capacitaremos a las comunidades para que ellos puedan administrar y mantener los refugios, además de realizar los talleres deportivos, lo cual es una excelente opción laboral”, cerró Luco.
