Repudio mundial e indignación causó la ejecución del joven luchador iraní Navid Afkari, quien fue acusado del asesinato de un agente de seguridad durante una protesta antigubernamental en 2018.

Tras su ejecución, en redes sociales comenzó a viralizarse el último mensaje que dejó el deportista desde la prisión de Adel Abad en Shiraz, donde fue condenado a la horca.

“Me acercaba a los 25 años cuando me vi obligado a dejar de lado la lucha libre para ayudar a mi familia. Aprendí cuando crecía con mi familia a poner por delante el honor de mi madre y el respeto antes que mis sueños y ambiciones personales. Siempre me han enseñado a hacer sacrificios por la gente que amamos”, partió diciendo.

En una grabación de audio, sacada secretamente de la cárcel donde estaba detenido, el luchador continuó relatando su historia, señalando que se encontraba en el “corredor de la muerte”.

“Regresé al trabajo y a los 6-7 meses fui arrestado, en septiembre de 2018. Y ahora estoy en el corredor de la muerte”, sentenció.

“Yo quiero que todo el mundo sepa que desde que era un niño soñé con hacer feliz a mi madre con convertirme en campeón internacional de lucha libre. El círculo de la vida me forzó a dejar de lado la lucha libre y tuve que ver las lágrimas de mi madre”, agregó.

“Pero ahora estoy feliz, porque he aprendido las verdaderas aspiraciones de la humanidad gracias a ustedes, gente extraordinaria. Aspiraciones que son mucho mayores que los campeonatos internacionales de lucha libre”, añadió.

“Durante mis años de lucha libre, nunca me encaré con un rival que jugara sucio porque es un deporte de honor, pero desde hace dos años, mi familia y yo nos estamos enfrentando a la injusticia contra el rival más cobarde”, cerró.