Tras el pitazo final del partido entre Ñublense y Universidad Católica, quedó el caos que protagonizó la hinchada del conjunto de Chillán contra la terna arbitral, pero ahora, el informe de Fernando Vejar, reveló nuevos detalles que podrían arrastrar una sanción más dura para los Diablos Rojos.

En la última fecha del Campeonato Nacional se registró una nueva jornada complicada para el arbitraje chileno, luego del caos que fue el duelo entre Ñublense y Universidad Católica en el estadio Nelson Oyarzún de Chillán.

En el compromiso, el referí central Fernando Vejar, mostró 11 amarillas, 4 rojas, lo que complicó el trámite del compromiso que terminó en victoria para la UC, pero tras el pitazo final del partido, se desató el desorden en la Región del Ñuble.

Esto se debe a que los hinchas del conjunto local las emprendieron contra la terna arbitral del duelo, arrojandoles ‘proyectiles’ e insultos, en donde los referentes del equipo, Nicola Pérez y Jaime García debieron intervenir para que no escalara aún más el conflicto.

Tras eso, hace algunas horas se conoció el informe arbitral que redactó Vejar, en donde se detallan más incidentes desconocidos.

Los detalles

En lo escrito por el umpire nacional criticado, se señala que en el final “el público ubicado en tribuna comienza a lanzar varios objetos (monedas y vasos con líquidos) hacia donde se encontraba la cuarta árbitra (Dione Rissios)”. Además, “estos hechos se volvieron a repetir a la salida del equipo arbitral, teniendo que ser resguardado por personal de seguridad”.

Posteriormente, se describe una situación que puede complicar aún más a Los Diablos Rojos. “Fuera del camarín nos estaba esperando el presidente de Ñublense, Sergio Gioino, y nos comienza a gritar de manera agresiva y desafiante, diciendo: “Sos un desastre concha de tu madre, nos robaste, ladrón pelotudo, nos robaste concha de tu madre, nos cagaste”“, sentencia Vejar.

Así también se detalla que el mandamás de Ñublense debió ser sujetado para que el tenso momento no escalara a los golpes, siendo sujetado por personal de seguridad, el director de turno, Patricio Almendra, y el jefe de seguridad de la ANFP, Luis Guerra.

Para finalizar, continúa con sus acusaciones revelando que “cuando el equipo arbitral iba a ingresar al camarín, me empuja de manera agresiva por la espalda. Esto fue observado por el director de turno y el jefe de seguridad de la ANFP”.

Sin dudas un duro registro e informe que podría arrastras consecuencias en diferentes escenas para Ñublense, tras el caos vivido en la fecha Nº7 en su estadio.

Por un lado son las sanciones que les pueden brindar a el presidente del conjunto chillanejo y otros son las fechas de castigo que les pueden brindar a los tres hombres expulsados, Nicolás Zalazar, Raimundo Rebolledo y Juan Leiva.