Celebró con Deportes Concepción, le amargó un partido a Arturo Vidal y ahora, toma pedidos de comida rápida. La carrera del portero Ricardo Cárcamo dio un vuelco que hoy lo tiene lejos de las canchas.

La historia de Ricardo Cárcamo es bastante peculiar. Mientras anota pedidos de comida en una libreta, asoman esos recuerdos de sus días en el pórtico del estadio Ester Roa, ese que a pesar de todo, lo llevó a cumplir su sueño en la cancha con la camiseta de Deportes Concepción.

El recorrido de Cárcamo en Nonguén comenzó a los 10 años, cuando lo recibió Julio ‘Don Nino’ Chávez (histórico utilero lila) y se quedó entrenando en las divisiones inferiores tras pasar un periodo de pruebas.

Ricardo Cárcamo en el fútbol infantil de Deportes Concepción
Cedida

El inicio no fue fácil, recuerda, en diálogo con BBCL.

Al canterano penquista le tocó jugar de segundo arquero en Deportes Concepción y rápidamente escaló al primer equipo, donde entrenó palmo a palmo con el titular Cristian Limenza en 2016, dado que, por reglamento, había que tener a un juvenil en banca.

Lo que el naciente futbolista -en ese entonces de 17 años-, no sabía, era que lo que parecía ser un meteórico inicio en el fútbol, se convertiría en una verdadera pesadilla.

Desafiliación, un antes y un después

La desafiliación de Deportes Concepción en 2016 marca parte negra en la historia lila y más aún, una trascendencia permanente.

El hecho de desvincular completamente al conjunto penquista del fútbol, sin duda, tuvo repercusiones. Pero, ¿qué culpa tiene un juvenil? Ninguna, pero el precio a pagar no era negociable.

“Estábamos entrenando mientras se hacía la reunión entre el club y la ANFP, y en esa misma tarde, nos avisaron que el equipo había sido desafiliado. Éramos todos cabros, nos tiramos al piso a llorar porque no podíamos hacer nada. No volvimos a entrenar nunca más”, rememoró Cárcamo.

Jugadores del fútbol joven se enteran de la desafiliación de Deportes Concepción.
Mauricio Pozo | Twitter

Para fortuna del ‘León de Collao’, sus hinchas empezaron a trabajar desde cero, pero con la esperanza de volver algún día.

Con ese aliciente, la directiva encabezada por Víctor Tornería tomó las riendas de Deportes Concepción y lo reorganizó como Club Social y así, dicha administración encabezó el retorno del Conce al profesionalismo, luego de cuatro años de haber sido desterrado del fútbol por decisión del Consejo de Presidentes de la ANFP.

El regreso y los años dorados: el rugido en Tercera

En esa fugaz historia, Ricardo Cárcamo también formó parte. Todo comenzó con el denominado con el ‘Equipo de la Resistencia’, conducido por Antonio Zaracho y que contó con la presencia de jugadores recién llegados y experimentados, como , Ángelo Giolito, Daúd Gazale y Esteban ‘Chino’ González.

Eso sí, como siempre, al ‘Ricky’ le tocó partir de atrás, hasta que un día llegó su oportunidad. El sábado 25 de noviembre de 2017, Cárcamo debutó bajo los tres palos de la portería morada en Collao y desde ahí, comenzó a hacerse un nombre en el primer equipo.

Cedida.

Corría el año 2018 y al ‘Conce’ por fin se le abrió una puerta: empezar desde abajo para resurgir, en la última categoría del fútbol chileno. La Tercera División B fue el lugar designado, sinónimo de decadencia para algunos, oportunidad para otros. Y así fue para Cárcamo.

El portero rápidamente empezó a destacar en aquel año e incluso, según datos de Historia Lila, alcanzó cuatro partidos consecutivos sin recibir goles, cifra en la que igualó en registros a reconocidos ex porteros del Conce como Mario Osbén (1972), Daniel Montilla (1985), Nelson Cossio (2000) o Cristián Limenza (2014).

“Jugué contra Cauquenes en liguilla y luego con Buenos Aires de Parral, ahí no solté la portería y seguí hasta la otra temporada”, recordó.

Entre el movido año del elenco lila, Cárcamo guarda un especial recuerdo de un partido que hasta hoy, según contó, lo marcó: el duelo contra Rodelindo Román en el Bicentenario La Florida.

De hecho, en la previa de aquel compromiso, Ricardo Cárcamo también recordó una particular anécdota que involucra a su hermano gemelo, Francisco -a la izquierda de la imagen-.

Ricardo Cárcamo (der.) y su hermano, Francisco (izq.)

“Íbamos a jugar contra Rodelindo y en la mañana me escribe un hincha enojado, diciéndome ‘que te creís conchetumadre, por qué andas tomando borracho culiao si tenemos que ganar’ (sic.) y yo me sorprendí, porque me mandó una foto, pero era el ‘Pancho’ (Francisco) el que andaba en una disco. Después todos se enteraron en el plantel y se rieron de mí”.

Tal enfrentamiento, donde los hinchas lilas repletaron La Florida para ver la clasificación de su equipo ante Rodelindo, contó con la presencia de nada más y nada menos que Arturo Vidal en las tribunas.. En la cancha, el ‘León’ le aguó la fiesta al conjunto del ‘King’, con Ricardo Cárcamo bajo las mallas del reducto capitalino.

“Es chistoso, porque vimos desde antes como estaban armando un banquete y el salón VIP para la llegada de Vidal y Felicevich, pero después no pudieron celebrar”, rememoró entre risas.

Archivo Sebastián Brogca | Agencia UNO

Entre las sombras y el adiós

La campaña personal de Cárcamo en el ‘León’ finalizó en 2018 con un celebrado subcampeonato en Tercera B y el ascenso inmediato a Tercera A. Una importante lesión lo sacó de las canchas en 2019 y cuando volvió, otra vez le tocó esperar.

Celso Castillo fue el portero titular del ‘Conce’ en esa campaña, que contó con una recordada victoria lila por 3-1 en la final de la liguilla de ascenso contra Deportes Limache. A pesar de ello, el compromiso fue el mismo.

Finalmente, Cárcamo jugó 26 partidos con la camiseta lila en el fútbol amateur y ya en 2020, logró debutar en el profesionalismo con Deportes Concepción, en la derrota de su equipo frente a Independiente de Cauquenes. Ese fue el único duelo que disputó en toda la temporada, ante la titularidad de Sebastián Contreras.

Cedida

Aquella campaña, precisamente, fue una de las más negras del Conce en el fútbol profesional. Las y los hinchas pedían su retorno al arco.

“Yo sabía que lo hacían, en ese momento le tocó estar a Sebastián (Contreras), pero mi compañero tenía más experiencia que yo. Me hubiera gustado jugar más, fue difícil vivirlo desde afuera. Si descendía el Conce conmigo en el arco, lo habría enfrentado con honor y la frente en alto, porque me iba con el equipo de mis amores”, señaló.

A pesar de que el equipo descendió en cancha frente a Deportes Vallenar, posteriormente, se salvó por secretaría.

Con un pie y medio fuera de su club de orígen, el guardameta decidió buscar otras opciones y las encontró en la cocina, específicamente, en ‘La Picá del Tío Juanito’, ubicada en las cercanías del Casino Marina del Sol y al frente de la Universidad Andrés Bello e Inacap en Talcahuano.

Cedida

“Este carrito es de la familia de Evelyn, mi esposa. Lamentablemente se quemó hace unos meses, pero ya volvimos. Tenemos buena clientela e incluso, vienen hinchas del Conce a comprar y nos quedamos conversando harto rato. Me pone feliz que me reconozcan y siempre me nombren lo que hice cuando jugué”, reconoció.

“Vendo completos, fajitas o churrascos durante el día y a veces hasta la madrugada, pero no me molesta. Es más, estoy agradecido de poder trabajar, tengo que poner el hombro por la motivación de mi esposa y mis dos hijas. Me dolió irme del fútbol y del Conce, pero soy autocrítico y quizás no hice las cosas bien”, finalizó Cárcamo.

La última experiencia en el balompié nacional del formado en Deportes Concepción fue en Independiente de Cauquenes, equipo que lo contrató tras estar un año sin jugar durante la temporada 2022. Eso sí, solo vio acción en dos partidos.

A pesar de que se alejó del fútbol, Ricardo Cárcamo sigue entrenando en silencio, tal como siempre lo hizo, con el recuerdo latente de sus tristezas y alegrías con el equipo que tanto ama, Deportes Concepción.