La rebeldía le pasó la cuenta. El Club Deportes Vallenar atraviesa -probablemente- el peor momento deportivo de su historia.
Sí, mucho peor que lo ocurrido en diciembre del 2017 cuando fue notificado de que debían repetir la serie de penales ante Melipilla tras haber conseguido el ascenso a la Primera B. ¿El motivo? Un error del árbitro Eduardo Gamboa.
Aquella vez el cuadro ‘verdiblanco’ no se presentó a disputar por segunda vez el enfrentamiento desde los ’12 pasos’, por lo que la ANFP decidió que Melipilla se quedara con el ascenso.
Hubo reclamos numerosos desde Vallenar. Se acudió al TAS y las instancias de apelación de la ANFP, pero la decisión nunca se cambió.
Esto último llevó al cuadro del Huasco a presentar requerimientos legales ante la justicia -lo que es penado por la FIFA y podría perjudicar al fútbol nacional- buscando revertir la situación, una decisión que provocó un nuevo y complejo escenario un año después: el club está siendo expulsado del balompié profesional.
Así es. El Órgano de Primera Instancia de la ANFP comunicó a la entidad deportiva que su licencia fue cancelada, como lo notificó a través de una carta que fue publicada por La Tercera.
“Se cancela la licencia de clubes para el 2019 al club Deportes Vallenar, otorgada por resolución del órgano de Primera Instancia (OPI) N° 038-018, con fecha 7 de noviembre de 2018″, dice el escrito.
Entre los motivos, el principal es que “la ANFP ha sido notificada con fecha 14 de noviembre de 2018 de la demanda ordinaria presentada ante el 9º Juzgado Civil de Santiago, Rol 30497-18. Mediante la mencionada demanda, el club incumple el requisito J.1.letra C) del artículo 20 del Reglamento de licencia de Clubes”.
Vallenar presentó su apelación a esta fuerte determinación, indicando que se vieron obligados a ir a tribunales ordinarios porque la ANFP no validó la demanda ante el TAS.
Este jueves ambas partes tendrán una audiencia en Quilín. Al respecto, el presidente del club, John Sol, expresó al citado medio que “iremos por un tema de respeto. Nosotros no sacaremos la demanda, a no ser que lleguemos a un acuerdo que nos convenga”.
“¿Qué saco con sacar la demanda para seguir participando, si igual van a intentar perjudicarme durante el próximo año? Si tengo que seguir con la demanda y no puedo participar, seguiré con la demanda. Esto es una medida de presión”, complementó.
Finalmente, Sol acusó que “en la ANFP nunca nos han querido. Repartieron $25 millones entre cada club de la Segunda División. A todos les dieron, menos a nosotros. Este año nos han perseguido todo el torneo, es impresentable”.