Nicolás Maturna vive un buen presente futbolístico en Universidad de Chile, su paso por otros clubes como Iquique, CD Alcoyano de España y Palestino le hicieron crecer en lo deportivo, alzándose hoy en día como una de las buenas figuras del conjunto azul.

A punta de esfuerzo volvió al CDA en donde se formó como profesional, empeño característico en la vida del jugador, que a sus 13 años fue acogido en la Aldea Mis Amigos de Peñaflor (hogar que colabora con el Sename) tras ser maltratado por su padrastro en la infancia.

Y tomando en cuenta el problema que aqueja al Servicio Nacional de Menores, luego de que la entidad remitiera a la Fiscalía el pasado viernes un informe dando cuenta que en 11 años se contabilizaron 865 decesos, el jugador dio su visión al respecto, comentando las medidas anunciadas por Bachelet para mejorar la protección de los niños.

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“Me parece bien. Ojalá que los recursos lleguen a los hogares de menores y no se queden en la burocracia. La plata debe repartirse entre los niños”, explicó Maturana a La Cuarta sobre la modificación que se pretende llevar a cabo en los centros, separando a niños vulnerables de los menores infractores de la ley.

Esta medida, acertada según expone el mediocampista, tiene un aspecto importante que explica se debe considerar, pues remarca que “es diferente un niño que se porta mal a un delincuente“.

“Me parece adecuado. Pero también creo que depende del contexto. Es diferente un niño que se porta mal a un delincuente. Un niño que se roba un chocolate para comer porque tiene hambre no debería ir a parar con los que han participado de un robo importante o en un asesinato. Tienen que estar con otros de una peligrosidad parecida para que no aprendan malas costumbres”, comentó.

A juicio del jugador los dineros destinados a los reclusos no deben ser mayores a los que se gasten en los menores, $594.000 mensuales sobre los $201.000 para los niños, según recoge el citado medio.

“Eso está mal. Creo que los presos deberían trabajar para el país. En vez de ser una carga podrían aportar con dinero para que cada uno se pague su comida y sus cosas. Pero también está mal que les tiren muchos años por cosas menos graves como vender discos piratas sin permiso, mientras que los ladrones de cuello y corbata salen libres”, puntualizó.

Maturana fue aún más crítico con los políticos que se han referido a la situación por la que pasa el Sename, asegurando que ellos, “no tienen idea qué dicen”.

“No tienen idea qué dicen, porque nunca han pasado por un hogar de menores. Deberían darse un tiempo, ir y después opinar“, argumentó, revelando según su propia experiencia las necesidades de los menores que pasan por estos centros.

“El 99% de la comida son donaciones de supermercados del sector o de padrinos, pero mi hogar era el mejor. Nadie se arrancaba, disfrutábamos del tiempo libre. El tío nos conseguía becas en colegios pagados y en universidades, y lo debía hacer él por su cuenta porque del Sename no había ayuda“, concluyó.