El conflicto entre el entrenador Eduardo Berizzo y el delantero Fabián Orellana sigue sumando antecedentes, luego que se decidiera que el chileno no jugará más en el Celta de Vigo.

Luego de que en la mañana de nuestro país se conocieran las palabras de Berizzo, donde aseguró que el atacante cometió una “falta de respeto”, las informaciones han surgido constantemente, aunque falta por conocer claramente el hecho que detonó el conflicto.

Lee también | Berizzo revela “falta de respeto” de Orellana: “Conmigo no pertenece más al equipo”

Una versión sobre lo que posiblemente ocurrió entre ambos la entregó la periodista española Paula Montes en el programa Ser Deportivos de la radio Cadena Ser, donde señaló que desde “hace semanas los dos protagonistas, jugador y entrenador, no se dirigen la palabra, y tras recibir el alta y verse fuera de la lista ante el Valencia, el chileno entró en cólera“, según recoge el portal El Desmarque.

La situación llegó a un punto de no retorno por “la actitud de Orellana tras conocer su ausencia en la lista de convocados en el intrascendente partido de Copa del Rey ante el Valencia”, de la semana pasada. Una decisión por la que “Orellana enfureció y en una desagradable discusión con el entrenador le faltó muy gravemente al respeto”.

Lee también | Orellana reconoce error pero ‘repasa’ a Berizzo: “Fue una persona muy desleal conmigo”

El medio indica que ahí Berizzo separó del plantel al chileno. Luego se intentó resolver el problema en una reunión entre ambos y con la directiva del Celta como mediador, previo al duelo del domingo ante Alavés. Una cita que no tuvo éxito y tras la cual el club decidió apoyar a Berizzo e iniciar el proceso de salida de Orellana de Vigo.

La nota sostiene que Orellana “ya había tenido problemas con otros técnicos en el Granada, en la selección chilena e incluso en el Celta, cuando Luis Enrique pidió que se buscase equipo, aunque en este último caso el aspecto deportivo primaba sobre el personal”.

Recordemos que Orellana señaló que Berizzo “fue una persona muy desleal conmigo”, a la vez que se negó a explicitar el motivo del conflicto, aunque apuntó que “no fue algo tan grave como lo pinta el entrenador. Pero cada uno piensa como quiere”.