El Club Atlético Independiente de Avellaneda publicó en sus redes sociales un sentido video en que culpa a Universidad de Chile de los serios y dramáticos incidentes ocurridos en su estadio, por Copa Sudamericana.
“El 20 de agosto de 2025 quedará marcado como uno de los días más tristes y oscuros en la historia del fútbol argentino y continental. Lo que se vivió en el estadio de Independiente es algo que jamás pensamos que podríamos vivir”, comienza señalando la voz en off.
De acuerdo a la producción audiovisual, “los incidentes comenzaron cuando la parcialidad de la Universidad de Chile sembró la violencia que luego se multiplicó”.
“Ataque cobarde y planificado”
“Destruyeron cámaras de seguridad, amenazaron y agredieron a trabajadores, arrasaron con las instalaciones, rompieron los baños y utilizaron los escombros como armas. Piedras, proyectiles y bombas fueron lanzados contra hombres, mujeres y niños que habían ido a alentar a Independiente”, enfatizan.
Luego, destacan que “durante el primer tiempo se solicitó la suspensión del encuentro, pero el partido siguió a pesar de la violencia en la tribuna sur alta”.
El relato no considera el informe del delegado de Conmebol, quien ratificó que Independiente comunicó por parlantes, sin su autorización, la orden de desalojar de la tribuna visitante.
Los siete veces campeones de Libertadores acusan que los desmanes provocados por hinchas azules fueron “un ataque cobarde y planificado”.
Más allá de los absurdos desórdenes de los ‘universitarios’, ya descritos, el registro omite algunos pasajes, como cuando hinchas del Rojo ingresaron a una bodega para sacar toda clase de objetos contundentes, como fierros, palos, escombros, usados luego para linchar a hinchas chilenos.
“Independiente quedó solo”
Más adelante, siguen con un relato épico: “Independiente quedó solo, como tantas otras veces, donde hinchas del fútbol argentino quedaron solos en las canchas propias y ajenas”.
“Hubo agresiones, hubo heridos y hubo dolor. También hubo dignidad. Hubo socios y socias que se ayudaron entre sí, desconocidos que se protegían mutuamente de los escombros y las butacas que caían cobardemente desde la tribuna”, cuentan.
El elenco argentino resalta que “hubo médicos, socorristas y empleados que actuaron de inmediato para asistir a cada lesionado”, en circunstancias que hubo personas heridas en riesgo vital, abandonadas en las tribunas.
“Responder con la misma moneda no puede ser una opción”
Eso sí, en un sutil mea culpa, Independiente indica que pese a los ataques sufridos, “responder con la misma moneda no puede ser una opción”.
“Nos estamos encargando de identificar a estos delincuentes que se esconden detrás de un escudo para expulsarlos como socios y solicitar que nunca más pisen una cancha de fútbol”, aseguran.
Finalmente, y obviando que el plan de seguridad les había exigido presencia de guardias en el sector visitante, comentan que es una oportunidad para que “nunca más un hincha argentino, sin importar el color de su camiseta, vuelva a quedar a merced de los violentos”.
Una pieza más de una guerra comunicacional, en que tanto U. de Chile como Independiente buscan mostrarse como víctimas, a la espera de las sanciones y definiciones que tome Conmebol en Paraguay.
Enviando corrección, espere un momento...
