La agresión de un hincha del Girondins de Burdeos a un jugador del Rodez ha terminado con una sanción sin precedentes en el fútbol de Francia.

El Girondins de Burdeos, de la segunda división francesa, recibió este lunes una dura sanción de la Comisión de Disciplina de la Liga por la agresión de un espectador a un jugador del Rodez.

La Comisión dio el partido por perdido al Burdeos, que ve cómo se esfuman sus posibilidades de ascenso a primera división (Ligue 1).

Además, el Burdeos comenzará la próxima temporada con un punto menos y la grada sur de su estadio estará cerrada durante los próximos dos partidos, con un aviso de cierre de otros dos en caso de nuevos incidentes.

El Girondins de Burdeos llegó al último partido de la temporada, el 2 de junio, con la necesidad imperiosa de ganar al Rodez para retornar a primera división.

Sin embargo, el encuentro se suspendió definitivamente en el minuto 23, segundos después de que Lucas Buades abriera el marcador para el Rodez.

Tras marcar el gol, Buades se acercó a la grada, de la que salió un espectador que le propinó un fuerte empujón antes de ser reducido.

El futbolista cayó al suelo conmocionado, aunque ha recibido acusaciones de exagerar la fuerza del impacto y de provocar a los seguidores locales, por lo que ha sido amenazado en redes sociales.

Sin embargo, el acta arbitral señaló que el jugador “no pudo responder” a los médicos por estar “conmocionado”, por lo que el colegiado suspendió definitivamente el encuentro.

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