El técnico Cuca dejó su cargo en Corinthians, asediado por la presión de hinchas y el plantel femenino por el caso de abuso sexual por el cual fue condenado en 1987.

El técnico del Corinthians, Cuca (Alexi Stival), renunció en la madrugada de este jueves al cargo, apenas una semana después de haberlo asumido, acusado de protagonizar un caso de abuso sexual en los años ochenta.

“Salgo en este momento y no era lo que quería, porque se espera una vida entera para estar aquí. Es un pedido de mi familia y mañana voy a estar en casa”, señaló Cuca en una rueda de prensa, ya en la madrugada, después del partido por la Copa de Brasil ante el Remo.

El técnico dijo que en su escasa semana de trabajo en el Corinthians pasó “por días muy pesados, de pesadilla” y que no “esperaba la avalancha por cosas pasadas hace mucho tiempo y resurgidas como si fuesen de hoy”.

El Corinthians, por su parte, comunicó en su perfil de Twitter que el entrenador “dejó el comando del equipo después de un pedido de la familia para resolver asuntos particulares”.

No obstante, tras la victoria sobre el Remo (2-0) y la clasificación en la definición por cobros desde el punto penal para los octavos de final de la Copa de Brasil, el presidente del club, Duilio Monteiro, afirmó a periodistas que Cuca estaba siendo “masacrado”.

El lunes, la plantilla completa del equipo profesional femenino se sumó a las protestas contra el entrenador, con un comunicado en el que las futbolistas apelaron a la “tradición democrática” del Corinthians y al “feminismo” del que hace gala el club.

Un grupo de aficionadas del segundo club más popular del país ya había protestado el pasado viernes en el centro de entrenamiento del equipo y, algunas de las barras bravas, recurrieron a las redes sociales para mostrar su disconformidad con la contratación.

Cuca y otros tres jugadores de Gremio estuvieron detenidos 30 días en Suiza en 1987, acusados de haber mantenido relaciones sexuales en grupo con una niña de 13 años de edad en el hotel de concentración.

Tras el pago de una fianza, los futbolistas fueron puestos en libertad condicional y volvieron a Brasil.