El equipo portugués, con Antonio Adán y Pedro Goncalves como principales figuras, eliminó al Arsenal de Mikel Arteta de la Europa League en un partido que tuvo de todo: lesionados, golazos y más aún, buen fútbol.
Con un colosal partido de Antonio Adán, decisivo en la tanda de lanzamientos penales (5-3 luego del 1-1 en los 90 minutos) y también durante el partido, gracias a tres intervenciones increíbles; y por otro lado, gracia el golazo desde mitad de cancha de Pedro Gonçalves, adornaron una épica gesta del Sporting de Lisboa, equipo que lapidó la aventura del Arsenal en la Europa League para clasificar a los cuartos de final de la competición.
Desde un principio, el duelo entre ingleses y portugueses, fue imperdible en el Emirates Stadium. En la ida (2-2), ya se vieron vestigios de buen fútbol; y en la vuelta, ambos equipos exhibieron lo mejor de sí para dejar uno de los mejores partidos de la competición hasta el momento.
Antonio Adán, portero del Sporting, demostró que está en el mejor momento de su carrera a su 34 años, luego de realizar varias intervenciones claves para ser el héroe de la noche en Londres.
Con su once más enfocado a la Europa League, (con Takehiro Tomiyasu, Nelson Reiss, Jorginho y Fabio Vieira), el Arsenal se enfrentó al reto de dejar K.O a un combativo equipo que en Portugal demostró tener argumentos de sobra para derrocar al cuadro ‘gunner’.
El Arsenal, tras salir al terreno de juego, tal vez cansado por sus esfuerzos para mantenerse en el liderato de la Premier League, consiguió ponerse por delante en el marcador gracias a Granit Xhaka, que a los veinte minutos aprovechó un rechace para marcar con un disparo desde dentro del área.
Antes, Francisco Trincao dio el primer aviso para el Sporting y se lesionaron Tomiyasu y Saliba. Arteta se vio obligado a recomponer su defensa (entraron White y Holding) y, pese al contratiempo, pudo conseguir una renta más amplia para afrontar el segundo tiempo con mayor tranquilidad.
Sin embargo, Antonio Adán, engrandeció su figura con una mano impresionante a Gabriel Jesús que dejó con vida a sus compañeros.
Entonces, Rubén Amorim olió la sangre y decidió no esconderse. Adelantó todas sus líneas, ordenó una presión asfixiante por todo el terreno de juego y el Sporting se convirtió en un hueso duro de roer durante toda la segunda mitad. El Arsenal, de repente, hincó la rodilla y fue incapaz de reaccionar frente a una avalancha que obtuvo su premio con una obra de arte de Pedro Gonçalves.
El volante del Sporting se reservó un hueco entre los candidatos al próximo premio Puskás al mejor gol del año de la próxima temporada. A los 62 minutos, paró el tiempo en el Emirates Stadium con un golazo que hasta dejó boquiabiertos a muchos hinchas del Arsenal.
Con un disparo milimétrico desde casi el centro del campo, Gonçalves sorprendió a Aaron Ramsdale, que ni siquiera fue capaz de rozar la pelota. La estética del lanzamiento, la limpieza con la que superó al portero del Arsenal e incluso el sonido del balón cuando golpeó la red, asombró a todos los amantes del fútbol.
El tanto de Pedro Gonçalves dejó a sus compañeros con ganas de más. Tenían la sensación de poder meter mano al Arsenal y estaban a un paso de conseguirlo. Y fue Marcus Edwards quien pudo culminar la faena con un mano a mano clarísimo ante Ramsdale que despejó con su cabeza una ocasión que habría evitado la prórroga.
En ella volvió a aparecer Antonio Adán. El portero madrileño se convirtió en la pesadilla del Arsenal. Primero, en un mano a mano ante Leandro Trossard y, después, en una estirada a un cabezazo de Gabriel. Ambas intervenciones salvaron al Sporting y mandaron la eliminatoria a definirse por penales.
Durante tal instancia, Antonio Adán terminó por convertirse en el peor villano que recientemente por Londres y adivinó el lanzamiento de Martinelli para decir que el Sporting de Lisboa, con su portero y con el golazo de Gonçalves, vivió una noche mágica al eliminar al Arsenal en la Europa League.
