Los Minnesota Timberwolves volvieron a dominar en Denver, apalearon a los Nuggets y dejaron a los campeones defensores de la NBA contra las cuerdas.

Los vigentes campeones de la NBA, los Denver Nuggets, se encuentran a solo dos pasos del abismo, después de que los Minnesota Timberwolves, con una actuación defensiva absolutamente memorable, los destrozaran este lunes 80-106 y ganaran su segundo partido seguido en Denver (0-2).

Estos asombrosos e implacables Wolves, que han vencido en sus seis partidos de Playoffs (barrieron a los Phoenix Suns por 4-0 en la primera ronda), se llevan ahora a Minnesota una ventaja enorme ante unos Nuggets sobrepasados y sin respuesta hasta el momento frente a los liderados por Anthony Edwards.

La mejor defensa de la NBA esta temporada impartió en Denver una clase magistral -sobre todo en una primera mitad para el recuerdo- de cómo asfixiar, estrujar y anular a una engrasada maquinaria ofensiva como los Nuggets de Nikola Jokic, que firmaron su anotación más baja de la campaña.

Anthony Edwards, Jaden McDaniels, Nickeil Alexander-Walker, Kyle Anderson y compañía desesperaron al juego exterior de los locales, especialmente a un Jamal Murray físicamente tocado y visiblemente frustrado.

No lo tuvo más fácil en el interior Jokic, que en esta serie debe pelearse con las rocosas torres de los Wolves: el ausente Gobert, el dominicano Karl-Anthony Towns y Naz Reid.

Otro ejemplo de la apabullante superioridad visitante fue que entre Edwards (16) y Towns (20) sumaron más puntos al descanso que todo el conjunto de Denver.

Nada cambió de forma radical en la reanudación, ya que Minnesota llegó a ganar por 32 puntos en el tercer cuarto. Es cierto que Denver consiguió ponerse a ‘solamente’ 19 puntos en el inicio del último periodo, pero en ningún momento peligró la victoria de Minnesota.

El tercer partido de esta serie se jugará este viernes en Minneapolis, que también acogerá el cuarto duelo el domingo: solo cinco equipos en la historia de la NBA han remontado una eliminatoria tras perder los dos primeros partidos de la serie en casa.