Uno de los momentos que serán más recordados de los Juegos Panamericanos de Lima será la insólita eliminación de la selección argentina femenina de básquetbol.

‘Las Gigantes’ cayeron ante Colombia en un partido que no llegó a disputarse. La razón fue que debían presentarse con su camiseta de local y llegaron con la azul, mismo color que usarían sus rivales.

Por lo anterior, las ‘cafeteras’ reclamaron a la organización y esta las declaró vencedoras por un simbólico marcador de 20-0.

El ‘papelón’ provocó un verdadero terremoto dentro de la Federación. El jefe de equipo, Hernán Amaya y la directora de Desarrollo del Básquet Femenino, Karina Rodríguez, presentaron sus respectivas renuncias a sus cargos.

Finalmente, el combinado argentino terminó en el quinto lugar tras superar a Canadá, pero faltaba la reunión con Federico Susbielles , presidente de la Confederación Argentina de Básquetbol. La instancia se dio este martes, donde Susbielles recibió en las dependencias de la Confederación a nueve jugadores del plantel.

En la reunión, además de emitir un comunicado , se acordó seguir trabajando en pos del desarrollo de este deporte, recalcando que el error tiene que servir como aprendizaje.

“Entendemos que el error, por cierto irreparable, tiene que servir para establecer los protocolos necesarios para que nunca más ocurra una circunstancia de este tipo en torneos fuera del ámbito FIBA. Nuestra postura fue, es y será la de seguir trabajando juntos por un camino de mejora donde ambas partes nos comprometemos a seguir adelante” señalaron.

De esta forma, se da término a uno de los grandes papelones en las últimas ediciones de los Juegos Panamericanos, que tuvo a Argentina, uno de los países más destacados de la presente edición tras conseguir 101 medallas, en el ojo del huracán.