Por Leopoldo Pulgar Ibarra

Son 41 pares de botas, cada una sobre pequeñas plataformas de madera colorida que parecen embarcaciones detenidas en su navegación. Y que, ahora, erguidas, muestran todos sus detalles en medio del C.C. Estación Mapocho.

En realidad, sólo 39 podrán contarse, porque dos de esas bases están vacías en representación de los chilotes que se perdieron alguna vez o partieron de su mundo habitual.

Su masiva presencia en esta muestra pública, semi dispersa o más agrupada, como si flotara en fiordos, esteros o zonas costeras, sacan a las botas de su condición de objeto habitual en el sur de Chile para sugerir uno o más sentidos de vida. Pero sí hay algo inequívoco: que todas estas botas alguna vez fueron usadas por alguien en su vida laboral y cotidiana.

Así lo plantean los 50 organizadores de esta exposición, integrantes de la Asociación de Artistas Visuales de Chiloé (Avach), invitados especiales por la XLIV Feria Internacional del Libro de Santiago, Filsa 2025, que estará abierta hasta el 30 de este mes.

Diversidad humana y natural

“Chilwe, huella atemporal” se titula esta muestra de arte visual de Avach, propuesta colectiva que proviene del Archipiélago de Chiloé. Ella alude a las 41 islas de este territorio de la Región de Los Lagos.

A través de botas de goma, recicladas e intervenidas por el mismo número de artistas, la muestra quiere reflejar sus visiones y experiencias en este territorio.

“Cada par de botas representa una de las 41 islas del archipiélago: la bota de goma es un símbolo fundamental en nuestro territorio, sirve para el verano y el invierno, es compañera y herramienta de trabajo. Se relaciona con las personas, los oficios, la actividad económica y el movimiento humano.

“Sería muy raro que alguien en Chiloé no tenga un par de botas de goma con las que pudo llegar a los lugares más increíbles y bellos de Chiloé, donde en general cuesta llegar”, dice la presidenta de Avach, América Davagnino,

¿Cada par de botas alude a una isla específica?

“No, no tenemos en la agrupación un integrante de cada isla. Además, hay islas que no conocemos o están muy lejos. Quisimos reflejar el territorio en sus elementos y conceptos más representativos, sean naturales o humanos: al trabajador del mar y del campo, las salmoneras, la contaminación, la protección de la flor y la fauna…

“Lo maravilloso de Chiloé es su diversidad. Tiene una riqueza cultural increíble. Hay cosas que no se visualizan cuando se viaja como turista. Existe un Chiloé profundo que se ve y aprecia cuando se habita, cuando se vive en la ruralidad.

“Quisimos mostrar la diversidad del archipiélago, entregar un mensaje, un elemento, un ambiente o la artesanía de la zona. Por otra parte, cada artista intervino y desarrolló su trabajo en las botas desde su estilo, estética y disciplina en las artes visuales”.

¿Qué aspectos del territorio fueron los más abordados?

“Varios trabajos hablan del agua, de la protección de los bosques y humedales, también de los navegantes que salen y no vuelven, porque se hundió la embarcación o se retiró del oficio. Hay mucho sobre las salmoneras y la contaminación.

“También se abordó la artesanía local utilizando fibras vegetales, lana o hilado, y las distintas formas de hablar en Chiloé… La fonética del chilote rural es distinta a la del chilote urbano”.

Orígenes y reciclaje

¿Usaron botas nuevas, se compraron 41 pares?

“Como son elementos muy habituales en el territorio, reciclamos. Conseguimos botas dadas de baja -la gente del campo nunca las elimina, siempre guarda las que no usa-. Incluso, usamos algunas que se encontraron en la playa y otras, con musgo adherido.

“También recurrimos a las que teníamos en nuestras casas y a las que desechan las salmoneras. Todas las reutilizamos para la exposición. Fue como un reciclaje”.

En la exposición están sobre una base pintada…

“A las bases de madera terciada, un material resistente y liviano que facilita su traslado, les dimos una forma irregular para sugerir el Archipiélago de Chiloé y sus 41 islas. Ninguna es igual a la otra, pero todas tienen una orilla curva como si fuera el recorrido de una isla. Están teñidas con anilina verde y café.

“Nuestra idea es que la exposición no sea algo tan estructurada, sino que se pueda adaptar a distintos espacios. En algún momento la podríamos instalar en una plaza y que las botas vayan unas detrás de otras. Tratamos que todos los elementos que usamos sean entendidos por la gente.

“Todas las bases tienen la huella de cada bota, con lo que sugerimos la historia de algún chilote. Por eso incluimos dos tablas vacías, pero también con el dibujo de una huella de bota, la de los chilotes que se van y no vuelven”.

Variedad y colorido

Hay algunas de color verde musgo…

“Sí. Decidimos que las botas fueran blancas o negras y que la goma se fuera manchando con una base cromática. Algunas son muy blandas y otras pertenecen a trabajadores de las salmoneras que tienen fierros por dentro.

“Hay de todas las variedades. Todas sirven para enfrentar la lluvia, el agua y el barro, la dureza del entorno donde la persona se desenvuelve, aunque algunas son más finas. Por ejemplo, las botas que yo expongo están intervenidas con tejidos”.

¿Qué materiales usaron para alterar sus colores originales?

“Hay de todo: acrílico, lana, tela, fotografías y telas pegadas. Otras tienen picorocos reales, como también, hechos con hilo y tejido bordado. Algunas representan mariscos o cholgas. Hay harto elemento de la naturaleza”.

¿Cómo ha reaccionado el público?

“Le ha llamado la atención la muestra. Es como ver algo distinto de Chiloé, no sólo un lugar turístico donde la gente conoce los palafitos y alguna isla: la gente queda sorprendida de la diversidad de cosas que hay en el lugar”.

Exposición “Chilwe, huella atemporal”

Muestra colectiva de Avac
Feria Internacional del Libro de Santiago
Centro Cultural Estación Mapocho.
Abierta de 11.00 a 20.00 horas.
Hasta 30 noviembre 2025.