Fotografía: Jaime Silva (BBCL)

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  • El escritor Jorge Baradit tiene grandes desafíos en su recién oficializado camino como postulante independiente, apoyado por el Partido Socialista (PS), para ser electo como uno de los 155 integrantes del órgano que redactará una nueva Carta Magna de Chile.

    Su opción de ir con el PS abrió dudas y despertó críticas respecto de su siempre alegada independencia, sobre todo cuando hay un enorme cuestionamiento y distanciamiento con los partidos políticos tradicionales y el rol que tendrán en el proceso constituyente.

    ¿Por qué el PS? ¿Obedecerá a su independencia o seguirá directrices de cúpulas políticas? ¿Por qué la gente tendría que confiar en él, esta vez, como parte del engranaje de una estructura partidaria? Son parte de las muchas inquietudes que Baradit zanjó en conversación con BioBioChile.

    Jorge Baradit respondió por sus polémicos mensajes discriminatorios en contra de la mujer publicados en su cuenta de Twitter en 2009, que seguramente serán tema en la campaña, y dijo que se arrepiente, reafirmó sus disculpas y aseguró que eso hoy no lo representa.

    “Tuvieron que ir a buscar un tuit así 11 años atrás, porque yo no soy así. Por ese tuit yo ofrecí disculpas en su momento públicamente y ya está”, precisó .

    “Uno siente como que nació para este momento”, dijo Baradit sobre su motivación para sumarse al desafío de postular al proceso constituyente.

    Al alero del PS

    Baradit confirmó que su candidatura será por el tan apreciado Distrito 10, que corresponde a La Granja, Macul, Ñuñoa, Providencia, San Joaquín y Santiago. “Hay un montón de gente que va por el mismo distrito, lo que puedo decir es que vivo ahí hace 25 años, no puedo ir por otro lugar”, dijo.

    -¿Cómo surge su acercamiento al PS?
    Me contactaron desde el PS hasta órganos a la izquierda del PC. Fue todo el espectro de la centro izquierda a izquierda de Chile. Terminé conversando con tres partidos, me sentía cómodo con cualquiera. La decisión de ir por el PS es porque se fueron dando las cosas, pero yo habría estado feliz con el PC o el FA. La unidad de la oposición es una cuestión estratégica, matemática, hay que hacer política ahí, con cuestiones infantiles no vamos a llegar a ningún lado.

    -Pero, ¿por qué no optó por la independencia?
    Porque no hay opción, las condiciones no están dadas, no se aprobó hacer pactos y sub pactos, se bajaron algunas barreras, pero siguen no estando las condiciones. Entonces, mi llamado es a que si los partidos no le dieron las condiciones a los independientes, hoy tienen la obligación moral de entregarle los cupos. El 80% del 25 de octubre no va a votar por la elite política, yo tomo el cupo porque las condiciones no están dadas para los independientes y se necesitan que sean ellos quienes dirijan la Convención Constitucional.

    -Existe la Comunidad por la Dignidad, donde están Ana María Gazmuri y Claudio Narea, entre otros, ¿por qué no con ellos?
    No porque el objetivo de ellos no es presentar una lista, lo que nosotros queremos hacer es tomarnos y ayudar a que los independientes se tomen los cupos de los partidos políticos. La Comunidad por la Dignidad lo que hace es adscribir a un manifiesto, es antineoliberal, es antipatriarcal, va por los derechos garantizados, por una cantidad de objetivos constitucionales, a los que vamos a adherir y a defender aunque vayamos por RN, por decir algo.

    “Seré un canalizador”

    -¿Por qué la gente debería votar por usted, qué es lo que plantea?
    La invitación que hago no es por un programa que tenga definido. Lo que yo planteo es que no tengo que ser un representante, sino un canalizador y lo que propongo es que mi campaña sean asambleas y cabildos, y lo que yo voy a tener cuando me presente el día 11 de abril es una síntesis de lo que ha gente ha pedido en esas instancias. Mi programa va a ser prediseñado por las personas. Lo que busco es que la Asamblea Constitucional sea lo más parecido a una Constituyente, remata.

    -¿Qué garantiza lo que señala?
    Mi garantía es que pertenezco a ese 80%, que votó “Apruebo” en el Plebiscito. Que nací con las patas en el barro y nadie me viene a contar lo que pasa y estamos viviendo. Puedo ser un buen canalizador, conozco la historia de mi país, los procesos históricos.

    -No obstante, quiéralo o no al ser independiente, pero por un partido, representa a ese color político, ¿va a obedecer las directrices del PS en el proceso constituyente?
    Cuando el PS me llama para conversar es porque ellos sienten que mis ideas se parecen a las de ellos…, y no al revés. Cuando yo converso y ellos aceptan mi candidatura es porque consideran que lo que yo quiero y quiero hacer está cerca de lo que ellos sienten. No hay compromiso, no hay contrato y tengo la libertad absoluta, es parte de lo que conversamos. Continúo siendo independiente.

    -¿Cómo le va a pedir a la gente que vote por usted si al final lo apoya un partido tradicional, de los cuales las personas cada vez se ha alejado más, o no?
    Mi primera certeza es que los independientes la tienen difícil, lo más probable es que los que salgan vayan en los cupos de partidos y tendría que haber dos cosas, el compromiso de mantenerse como tal y del partido que deberá ser de proteger esa independencia. Además, se estarían disparando en las patas, si un partido presiona al independiente y se nota, va a perder credibilidad, deben proteger, es estratégico para los partidos. Soy un independiente absoluto que va a llevar su mandato, la Convención Constitucional, a tu plaza.

    Tu historia es mi historia

    -¿Cómo espera que la historia registre su nombre?
    Me gustaría que esto fuera recordado como un proceso detonado, guiado y pensado por el pueblo de Chile, sin ninguna dirigencia, liderazgo, un movimiento atípico que logró pensarse a si mismo. Y a uno, a los convencionales, como personas que se pusieron al servicio de un programa, que está escrito desde el año pasado en las asambleas y cabildos. Asistí a 19 de ellas y el pueblo de Chile tiene un programa del pueblo de Chile. Entonces, el protagonista histórico es él.
    Eso suena lindo. Alguien que llevó el mandato popular a la Convención Constitucional y lo defendió hasta el final.

    -Si pudiera pensar en personajes de Chile, ¿A quiénes convocaría a redactar esta Constitución?
    Tengo cuatro. Francisco Bilbao porque fue el primero que comprendió que el pueblo de Chile era parte de la sociedad, que merecía dignidad. Después, Luis Emilio Recabarren, porque siendo hijo y el mismo un obrero fue capaz de llegar a ser diputado y en el fondo crear la fuerza trabajadora, él no le pertenece al PC sino a la historia de Chile. También, don Clotario Blest, él desde un punto de vista actual, era contra los partidos políticos, sentía que todas las decisiones debían tomarla los trabajadores y sindicatos. El último, sin duda, Salvador Allende, quien es el gran demócrata de nuestra historia y él tenía el sueño de completar el ciclo constitucional de Chile, porque la primera Constitución de 1833 puso en el trono a la clase alta, la de 1925 agregó a la clase media y la Constitución que preparaba Allende, era para incluir a todo el pueblo de Chile en la administración y beneficios del Estado. Ese paso truncado, damos hoy.

    -Se podría inferir que, bajo su mirada, Allende sería el infaltable…
    Los cuatro, pero sí, creo que Salvador Allende es una persona que me encantaría que estuviera acompañándome y fuera parte del proceso.

    -Se plantea que la Constitución de 1980 fue ideada, principalmente, por el exsenador Jaime Guzmán y ahora serán 155 personas…
    Todas las constituciones en Chile han sido escritas por muy pocas personas en cuatro paredes, casi todos hombres. La Constitución debería jactarse de haber sido escrita por una diversidad de personas, mitad hombres, mitad, mujeres, pueblo, artistas, escritores y una diversidad. No tiene que ser escritas por personas que saben de leyes constitucionales, ellos son técnicos que deben apoyar las distintas visiones. Jaime Guzmán tendría su espacio porque esta Constitución a diferencia de la de 1980, no es una venganza contra una clase social, sino que es inclusiva, hasta con quien defendió el Gobierno Militar, nadie en la centro izquierda pretende escribirla y que sea exclusiva del sector, sino que de todos. Todos tendrían espacio en la Convención Constitucional, incluso Jaime Guzmán.

    Mensajes arrepentidos

    -En el balance de su vida, ¿Qué es lo que ha hecho mejor y de qué se arrepiente?
    Lo mejor que he hecho es que estoy dispuesto a aprender, porque me equivoco mucho. Soy una persona que se equivoca un montón porque está tratando de aprender. Lo peor que hago es equivocarme y lo mejor que hago es aprender.

    -Están sus mensajes en Twitter discriminatorios a la mujer que probablemente se los traerán de vuelta en la campaña, ¿Cómo va a responder?
    Con la verdad. Escribí un tuit muy torpe y de él pido disculpas y dista de ser quien soy yo. Del resto, solo explicar que existe una campaña bien sucia basada en eso, pero lo que sí, no tengo intenciones de esconder mi proceso de aprendizaje. Tuvieron que ir a buscar un tuit así once años atrás, porque no soy así. Pero, por ese tuit yo pedí disculpas en su momento públicamente y ya está. El resto ha sido una campaña bien atroz que ha dañado y producido un dolor tremendo en mi familia, mi madre y mi hijo, porque es muy nociva y venenosa.

    -Pero, probablemente, no habrá piedad….
    Saben lo que me pasa, no tomo, no fumo, no salgo, soy muy fome, soy ratón de biblioteca, y por lo tanto, no me van a encontrar ninguna otra cosa, asegura.

    Muchos deben andar buscando “ropa sucia” qué salir a ventilar en público. Y no solo en su caso. Es un popular deporte nacional y, con la pandemia, sobra tiempo.

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