Fotografía: Cedidas a BBCL

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  • Un incendio que cobró la vida de cuatro trabajadores. Ocurrió en las dependencias de Bodegas San Francisco, en la comuna de Pudahuel, donde la empresa Explonun, filial de Enaex -que a su vez es controlada por Sigdo Koppers-, mantenía nitrato de sodio, aluminio y óxido de fierro sin permiso municipal. La gravedad del hecho derivó en dos fiscalizaciones por parte del municipio a las instalaciones de la empresa de bodegaje. Para sorpresa de los fiscalizadores, un nuevo galpón arrendado por Explonun quedó al descubierto, el cual no contaba con permiso municipal ni sanitario para el acopio de materiales peligrosos. Desde la empresa, aseguran que ellos cumplen con la normativa vigente. Sin embargo, la Municipalidad decidió interponer una querella por cuasidelito de homicidio contra quienes resulten responsable de lo ocurrido el 2 de marzo. Por otro lado, y con la información de los últimos hechos, la empresa arriesga la cancelación de los permisos para operar con elementos peligrosos. Los hechos los revela la Unidad de Investigación de Radio Bío-Bío.

    Mientras el Servicio Médico Legal (SML) se prepara para entregar los cuerpos de los 4 trabajadores que murieron producto de la explosión y posterior incendio de la empresa Explonun, filial de Enaex, dirigida por Juan Andrés Errázuriz Domínguez, y que operaba al interior de las bodegas San Franciscos en Pudahuel, ahora se conoce un nuevo y peligroso antecedente: la empresa mantenía productos de similares características en otro de los galpones del mismo centro donde se desató la tragedia y de la cual las autoridades locales no sabían.

    Fue la Municipalidad de Pudahuel la que, producto de un operativo sorpresa que realizó con inspectores municipales, se percató que la empresa de capitales chilenos estaba retirando en camiones del mismo centro logístico palets con cajas de elementos inflamables. Eran de diversos tamaños y se encontraban apiladas a lo largo de la bodega, según se ve en el registro fotográfico de los fiscalizadores.

    Frente a esos hechos, los inspectores revisaron con sus superiores los antecedentes, determinando que la bodega en cuestión no tenían registro alguno para operar en esa ala del centro de bodegaje, por ende, asumieron que era un peligroso descubrimiento por lo que decidieron actuar con las únicas herramientas que tenían: “partear” a la empresa y clausurar el recinto.

    Desde la Municipalidad advirtieron que esta nueva bodega, que se descubrió a 4 días de la tragedia, no contaba con autorización comunal ni de la Seremi de Salud para el acopio de material explosivo, lo cual infringe la normativa local, sanitaria y se transforma en un potencial riesgo para los vecinos. En todo caso no fue la única, sino que 9 bodegas más, que corresponden a otras empresas, también fueron clausuradas.

    “Cuando nuestros equipos vieron que estaban sacando hacia la calle interior de Bodegas San Francisco distintos recipientes que tenían el símbolo de inflamable en la parte de afuera les llamó la atención (…). Se acercaron, le preguntaron a las personas a cargo de la bodega cómo se llamaba la empresa y ellos manifestaron que eran Explonun, lo que para nosotros constituyó una sorpresa absoluta”, dice el alcalde (s) Jaime Romero, quien integró el equipo fiscalizador.

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    Descubrimiento que molestó a los responsables municipales, puesto que llegó horas después de reunirse por varias horas con la gerencia de Bodegas San Francisco, los que nunca les informaron de un segundo centro de almacenamiento en la propiedad investigada, según relató el subrogante del alcalde Johnny Carrasco, Jaime Romero. “Bodegas San Francisco sí sabía que tenían una segunda bodega. En ningún caso ellos nos señalaron o alertaron, habiendo conversado en terreno, que la empresa Explonun arrendaba otras bodegas al interior del complejo”, dijo Romero a la Unidad de Investigación de Bío Bío La Radio.

    Explicaciones

    Inquiridos por la Unidad de Investigación de Radio Bío-Bío, desde Explonun sostuvieron que “continúa recabando todos los antecedentes para aportar en la investigación que realiza la autoridad, referida al origen del incendio en el Centro Logístico Bodegas San Francisco en la comuna de Pudahuel”.

    Sobre la denuncia en particular, argumentan que “Explonun tiene vigentes estos permisos para todas sus operaciones”, los que entrega la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN).

    Dudas

    La acción denunciada desde el municipio, deja un manto de dudas respecto al actuar de la empresa en relación al caso, el cual está siendo investigado por el fiscal jefe de Pudahuel, Eduardo Baeza. Consultado sobre esta nueva bodega y el movimiento de material que se encontraban realizando sus trabajadores el pasado viernes 6 de marzo, el persecutor sostuvo a Radio Bío Bío que “en relación a la existencia de las otras bodegas de la empresa en el recinto, sus permisos y autorizaciones, es parte de las diligencias de investigación que están en curso y hasta que esa información no se allegue a la carpeta investigativa, la fiscalía por ahora no se referirá a ellas”.

    La Dirección General de Movilización Nacional (DGMN) también comentó la situación. Ante las consultas de la Unidad de Investigación sobre el caso, manifestaron que ellos no han “autorizado actuaciones para la empresa Obras civiles y Tronaduras Explonun”.

    La misma autoridad, reconoció que está a la espera de un informe técnico, en el que se determinarán, responsabilidades. Señalaron que luego de conocer los antecedentes “pueden llegar hasta la cancelación de los permisos otorgados” a Explonun.

    Querella

    Durante la misma semana de fiscalización, desde el área Jurídica de la Municipalidad de Pudahuel, presentaron una querella en el 1º Juzgado de Garantía por cuasidelito de homicidio en contra de todos quienes resulten responsables por las muertes de Abel Avilés Herrera, Juan Lacroix Orozco, Gustavo Salinas Muñoz y Gabriel Caamaño Pérez, cuatro víctimas de una tragedia que aseguran expertos en prevención pudo haberse evitado.

    En el texto judicial, se detalla que Explonun no cumplía con el reglamento “que se exige en el recinto, ni con los permisos municipales respectivos, puesto que, la bodega solo estaba autorizada para labores de administración y almacenaje, pero al momento del estrago, se procesaban químicos inflamables y otros materiales explosivos utilizados en labores mineras, razón que podría ser la causa de la magnitud del siniestro”.

    Mientras tanto, los familiares de las 4 víctimas, siguen a la espera que el SML les entregue los cuerpos para proceder recién a los funerales. Todo esto de forma paralela a las indagatorias de la fiscalía que por ahora se desconoce si estaría cerca o no de una formalización contra los ejecutivos. Lo que sí está claro, es que la Municipalidad de Pudahuel comenzó hacer el trabajo de inspeccionar los centros logísticos y de bodega de la comuna.

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