Quedan exactamente seis días para que el Mundial de Rusia 2018 vea luz verde, dando inicio a la justa más grande del fútbol internacional.
Detalles como la organización, las sedes, el himno y la mascota, se encuentran desde hace un buen tiempo afinados y a la espera de ser protagonistas en una nueva edición del evento más importante del planeta.
Eso sí, estos no son los únicos tópicos que le han dado dolor de cabeza a los organizadores, ya que hay uno que no solo debe robarse todas las miradas, sino que también perdurar en el tiempo: el balón.
Sí, el balón, la esférica, la caprichosa o cómo quieran llamarle. Esa que rodará por los prados de Rusia durante todo mes y que ha tenido diversos modelos, pesos, colores y diseños a lo largo de la historia. Aquí te dejamos un repaso. Tome nota y atención.
Si bien en la final del Mundial de Uruguay de 1930 aún no existía un ‘balón oficial’ y tanto Argentina como Uruguay querían jugar con su propia pelota, este modelo pasó a la historia por su diseño, así como porque fue la opción que ganó dicha cita.
Fue un balón muy similar al utilizado en el segundo tiempo de la final del primer Mundial. Su nombre era “Federale 102”, estaba confeccionado con cuero de color café y utilizaba una vejiga para ser inflado.
Fue el primer balón en integrar una válvula, ya que los dos anteriores tenían una vejiga y su inflado no era tan bueno como el de “Allen”, nombre oficial. Como era de esperar, su aparición marcó un antes y un después en la evolución de los balones de fútbol.
Producto de la Segunda Guerra Mundial, desde el año 1938 hasta 1950 no se realizaron mundiales de fútbol. No obstante, cuando todo se normalizó, Brasil se quedó con la organización de la cita y sorprendió cuando presentó a “Super Ball Duplo T” como su balón oficial.
El evento que fue organizado por los suizos cambió radicalmente el paradigma en torno a este tema. Y es que si bien dicha pelota también estuvo confeccionada con cuero, su color café claro y nombre “Swiss World Champion”, fueron muy distintos a los demás.
“Top Star” fue el nombre del balón que se utilizó en esta cita. Tenía 24 paneles y se fabricó en dos colores: uno en cuero amarillo/marrón y otro en cuero de color blanco. Para la gran mayoría, su aparición fue un gran retroceso en la tecnología y diseño de las esféricas.
El tercer lugar que nuestro país alcanzó en esta versión no fue lo único que llamó la atención. Y es que dentro de su organización una de las cosas más destacadas fue “Crack”, el balón encargado de rodar por los prados de las canchas de este lado del hemisferio.
La marca Slazenger fue la encargada de fabricar el balón de 1966, año en que la Copa del Mundo se disputó en el país donde se inventó el fútbol. Su nombre fue “Slazenger Challenge” y, aparentemente, les trajo mucha suerte a los ingleses, quienes al final de la cita se coronaron campeones de la misma.
Fue la empresa Adidas la encargada de diseñar el modelo del balón que utilizaron los mexicanos en su organización. “Telstar” fue su nombre, y sus cuadros blancos y negros fueron considerados el puntapié inicial de los diseños de pelotas que perduran incluso por estos días.
Los germanos decidieron seguir el estilo de México y cuatro años más tarde, crearon un balón idéntico al del Mundial pasado. Es más, tanto éxito tuvo la fórmula, que estos decidieron conservar los cuadros negros y blancos, cambiando solo el nombre por el de “Telstar Durlast”.
Una racha de buenas noticias y suerte les trajo “Tango” a los albicelestes, quienes no solo continuaron con el diseño presentado en México 76′, sino que también se hicieron dueños del trofeo dorado en su primera organización.
Siguiendo la lógica, los hispanos se unieron a la tendencia y bajo su organización presentaron a “Tango España”. Eso sí, si bien aquí se mantuvieron los colores blanco y negro, este tuvo una gran diferencia, ya que fue el primer balón en fabricarse con materiales impermeables.
Algunos años más tarde, la cita planetaria volvió a tierras aztecas. Y fue precisamente esto último lo que motivó el nombre del balón, el que no solo se convirtió en el primero en ser en completamente sintético, sino que también en poseer una mayor resistencia al agua.
En 1990 lo italianos se convirtieron en anfitriones por segunda vez en la historia. Como era de esperar, no se guardaron nada y sorprendieron al mundo cuando presentaron a “Etrusco Único”, balón que si bien conservó el ya clásico diseño, tuvo un cambio en su fabricación, la que le permitió tener una mayor velocidad sobre el prado.
El mayor evento del balompié masculino volvió a América, pero esta vez para quedarse por primera vez en tierras norteamericanas. El balón utilizado se llamó “Questra” y sus avances en cuanto a la tecnología, mallas de estabilidad y fibra trenzada, se robaron la atención de los presentes.
El “Adidas Tricolore” es considerado el último balón bonito en la historia de los Mundiales. Y es que la esférica con la que se jugó la recordada cita gala y que estuvo decorada con los símbolos tradicionales de su selección de fútbol, marcó un antes y un después en la fabricación de pelotas, al incluir una capa de espuma sintética, material que aumentó su durabilidad, recuperación energética y capacidad de respuesta.
Si de revolución se trata, el “Fevernova” se lleva la delantera. Y es que el balón que se diseñó en torno a la fiebre por la innovación de las culturas asiáticas, fue un boom de ventas. A nivel técnico, dicha pelota incluyó una capa de espuma refinada para darle mejores características de rendimiento, así como para conseguir que el disparo tenga mayor precisión y potencia.
En este año el gigante europeo se volvió a hacer de la organización de la cita. Por su puesto, volvería impresionar y luego de presentar al “Teamgeist”, un balón que tenía una superficie mucho más blanda y suave para rematar, dio mucho de qué hablar.
Como olvidar el histórico momento que vivieron los africanos en el año 2010, cuando la cita planetaria llegó por primera vez a dicho continente. No cabe duda de que no dejaron ningún detalle al azar y una prueba clara de ellos fue el “Jabulani”, balón que llamó la atención por la cantidad de colores que tuvo.
Según detalló la FIFA, el “Brazuca” fue el balón que más se probó antes de dar inicio al mundial. En cuanto a tecnología, este tuvo mayor agarre, mejor velocidad y una mejor estabilidad. Todo un éxito.