Felipe Beltrán | Agencia UNO

Senador Harboe propone refundar Carabineros y Gobierno proyectaría cambios profundos para el 2027

31 enero 2020 | 01:52

Tras la noticia de que el Gobierno pretende concretar una reforma en Carabineros para abril de 2027, lo que echó por la borda la propuesta del Frente Amplio que solicitó lo mismo pero en corto plazo, el senador del Partido Por la Democracia (PPD), Felipe Harboe, entregó una propuesta al Presidente Sebastián Piñera que apunta a una reforma profunda a las instituciones policiales.

Harboe llegó este jueves a La Moneda y le pasó una carpeta al Ejecutivo, con el material de su aporte, en una reunión con el Mandatario.

Entre las medidas más importantes, junto con transitar “a una policía de carácter civil y altamente profesionalizada”, apunta a la creación de un Ministerio de Seguridad Pública, el cual eximiría a la cartera de Interior de esa función y apunta a cuatro pilares.

“Esta es una propuesta de reforma, la más profunda que se ha presentado desde 1990 y lo que busca es iniciar un proceso de reforma estructural en el caso de la gobernanza civil de seguridad. Separar la función política del ministro del Interior, a la función de ministro de Seguridad. En segundo lugar, coordinar todas las agencias, la nueva agencia de ciberseguridad, la agencia de inteligencia”, dijo Felipe Harboe.

Los cuatro pilares

Los pilares expuestos en la propuesta de Harboe, la cual fue elaborada en conjunto con un grupo de experto, plantea como pilares: la subordinación al poder civil democráticamente electo, la orientación de servicio público enfocado en la ciudadanía, sistema de control, el monitoreo y evaluación y también una policía que se constituye como el organismo que garantiza los DDHH contra toda otra fuerza.

“Reformar Carabineros desde su origen, tanto del punto de vista de su proceso de selección, formación, formación continua, probidad, transparencia y equidad, de género, despliegue territorial y logístico, operativo”, enumeró el congresista.

También, el representante de Ñuble enfatizó en que “principalmente será una transformación de la institución en una entidad flexible, donde las unidades policiales territoriales puedan ser innovadoras y tener la posibilidad de implementar estrategias policiales diferenciadas, de acuerdo a cada comuna y su realidad. No como hoy que todo lo mandan de Santiago”.

Entre 3 y 4 periodos presidenciales

El mismo senador insistió en que su propuesta es de fondo y lo más probable es que si el Gobierno acepta, deberá implementarse en tres o cuatro periodos presidenciales.

“Es una propuesta de Estado, muy grande y que va a implicar muchos años. Pero, lo relevantes es que, por ahora, es darle el puntapié inicial. Para eso, lo que hemos sugerido es que el Presidente dicte en marzo un decreto supremo para crear la Unidad Coordinadora de la Reforma Policial, muy similar a la unidad coordinadora de la reforma procesal penal”, añadió el exsubsecretario del Interior del primer gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet.

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Los cambios deben ser estructurales (Carabineros), hoy no se tolera, y así lo dicen los informes de organismos internacionales, que sea el 2027″
- Diego Ibáñez, diputado de Corvergencia Social

En relación a lo que espera de la propuesta del Gobierno en la misma materia, Harboe dijo que su opción sería mucho mayor a la del Ejecutivo, la cual será oficializada en los próximos días, debido a que “nosotros no tenemos la limitación de ser gobierno y probablemente la propuesta del gobierno va a ser más reducida porque ellos están más preocupados de la contingencia”.

Desde el Frente Amplio

La crítica hacia la intención del gobierno de no concretar una refundación de la institución policial en el corto plazo llegó desde el FA.

El diputado y jefe de bancada de Convergencia Social en la Cámara Baja, Diego Ibáñez, indicó que “los cambios deben ser estructurales, hoy no se tolera, y así lo dicen los informes de organismos internacionales, que sea el 2027″.

Ibáñez explicó que “Carabineros no está preparado para estos nuevos tiempos. Se requiere una policía civil que aprenda a dialogar, a negociar con las manifestaciones, que entienda el orden público como el resguardo de los DDHH, sin confundirlo con brutalidad policial”.