Un calentamiento global de 3°C de aquí a finales de siglo, podría acabar con el 40% de la economía mundial. Estas son las conclusiones de un nuevo estudio que reconsidera las proyecciones sobre el cambio climático en la economía.
Liderado por Timothy Neal, profesor titular de la Facultad de Economía y también en el Instituto de Riesgo y Respuesta Climática (ICRR) de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia, este análisis sugiere que las consecuencias podrían ser peor de lo que se calculaba.
Neal dice que hay que expandir los modelos y considerar el clima global para conseguir un resultado más concreto. “Las proyecciones sobre cómo el cambio climático afectará al producto interno bruto (PIB) mundial han sugerido, en general, daños de leves a moderados“, señala en un artículo de The Conversation.
“Sin embargo, estos modelos suelen presentar una falla fundamental: asumen que la economía nacional solo se ve afectada por el clima en ese país. Los impactos de los fenómenos meteorológicos en otros lugares, como la forma en que las inundaciones en un país afectan el suministro de alimentos a otro, no se incorporan en los modelos“, apunta.
Su investigación resolvió esa falta e incluyó datos del clima global en los modelos para generar las proyecciones. “El daño previsto al PIB mundial fue mucho peor de lo que se creía, afectando la vida de las personas en todos los países del mundo“, asegura.
¿Cómo el cambio climático afecta a la economía mundial?
Estudios previos consideraron el comportamiento del clima en el pasado en escalas locales o regionales para obtener proyecciones, pero Neal y su equipo sumaron más factores.
Por ejemplo, los fenómenos meteorológicos extremos pueden causar daños en los países. Las tormentas e inundaciones causan daños estructurales, mientras que la sequía reduce la producción agrícola.
De hecho, se ha comprobado que las olas de calor afectan en los precios de los alimentos, la productividad de los trabajadores y también la salud de las personas. Así como pueden causar migraciones y con ello, otros conflictos.
Considerando estro, el estudio evaluó qué pasaría con la economía si las perturbaciones climáticas ocurren simultáneamente en varios países, como efecto del cambio climático.
“Esto perturbará las redes de producción y distribución de bienes, comprometerá el comercio y limitará la capacidad de los países para ayudarse mutuamente“, señala Neal.
“Descubrimos que si la Tierra se calienta más de 3 °C para finales de siglo, el daño estimado a la economía mundial aumentaría de un promedio del 11 % (según los supuestos de modelado previos) al 40 % (según nuestros supuestos de modelado). Este nivel de daño podría devastar los medios de vida en amplias zonas del mundo”, concluye el experto.
También puede haber variaciones, dice Neal, pero todas llevan a un mismo punto. “Modelos anteriores han afirmado que las economías de las zonas frías del mundo, como Rusia y el norte de Europa, se beneficiarán del aumento de las temperaturas globales. Sin embargo, observamos que el impacto en la economía mundial fue tan grande que todos los países se verán gravemente afectados“, plantea.
¿Qué se puede hacer para evitarlo?
Neal plantea un dilema y es que para reducir el calentamiento global hay que primero reducir las emisiones, lo cual conlleva costos económicos a corto plazo, pero beneficia a largo plazo, por lo que habría que buscar algún equilibrio.
“Modelos económicos recientes han sugerido que este equilibrio se lograría reduciendo las emisiones a un ritmo que permita que la Tierra se caliente 2,7 °C”, explica. Sin embargo, esta cifra está lejos de lo establecido por el Acuerdo de París.
Recordemos que, este acuerdo, bajo sugerencia de la comunidad científica que estudia el cambio climático, determina que la Tierra no debe calentarse más allá de 1,5°C para evitar repercusiones peligrosas en el futuro.
El estudio de Neal sugiere que habría que ampliar este límite para lograr un equilibrio, dejándolo en 1,7°C, lo que permitiría “equilibrar los costos a corto plazo con los beneficios a largo plazo”.
“Es evidente que la trayectoria actual de las emisiones de la Tierra pone en riesgo nuestro futuro y el de nuestros hijos. Cuanto antes comprenda la humanidad las calamidades que nos aguardan bajo un cambio climático severo, antes podremos cambiar de rumbo para evitarlo“, concluye.
Referencias:
Timothy Neal, Ben R Newell y Andy Pitman, Reconsidering the macroeconomic damage of severe warming. Environmental Research Letters, 2025.