Islandia autorizó retomar la caza de ballenas, tras dos meses de suspensión de la medida. Junto a Noruega y Japón, son los últimos tres países en autorizar la caza de cetáceos.
Según informó Radio Francia Internacional, este jueves, el Ministerio de Agricultura y Pesca que se retomará la medida “bajo estrictas condiciones”.
Ante la reanudación de la caza de ballenas, agrupaciones animalistas manifestaron que es una medida inaceptable. De hecho, la ONG, Humane Society International, a través de un comunicado, señaló que “La Ministra de Agricultura ignora las inequívocas conclusiones científicas que ella misma solicitó”.
Caza de ballenas: una muerte lenta y dolorosa
Fue a fines de junio, antes del inicio de la suspensión de la caza de ballenas, que autoridades veterinarias de Islandia manifestaron que la muerte de estos animales es demasiado lenta, ya que los arpones que se utilizan no matan a las ballenas inmediatamente, lo que provoca agonías de hasta cinco horas.
A esto se suma que la caza se realiza en el mar. Detractores agregaron que se trata de una industria “opaca” y que “nadie sabe realmente cómo se mata a los animales”.
Para justificar la reanudación, el gobierno islandés señala que “una base para cambiar los métodos de caza de ballenas de modo que haya menos irregularidades”, a lo que agrupaciones animalistas respondieron que “ningún cambio puede satisfacer las necesidades de protección de las ballenas”, por lo que piden poner fin a la “masacre”.
Actualmente, hay solo una empresa ballenera activa en Islandia, ya que la demanda de carne del cetáceo es un mercado que ha ido a la baja. Incluso, el último ballenero de dicho país anunció que esta sería su última temporada ballenera, por falta de rentabilidad.
