Este jueves 22 de abril se conmemora en diversas partes del mundo el Día de la Tierra, celebración que este 2021 cumple nada menos que 51 años.
Se trata de una instancia que busca generar conciencia en la población sobre los problemas ecológicos que afectan a nuestro planeta, como el calentamiento global.
Es por esto que en diferentes puntos del mundo se realizan actividades en honor a nuestra Madre Tierra. Eso sí, debido a la pandemia por covid-19, este año la gran mayoría serán en formato digital.
“El cambio climático, los cambios provocados por el hombre en la naturaleza, así como los crímenes que perturban la biodiversidad, como la deforestación, el cambio de uso del suelo, la producción agrícola y ganadera intensiva o el creciente comercio ilegal de vida silvestre, pueden aumentar el contacto y la transmisión de enfermedades infecciosas de animales a humanos (enfermedades zoonóticas)”, señala la ONU en su portal oficial.
“De acuerdo con el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), una nueva enfermedad infecciosa emerge en los humanos cada 4 meses. De estas enfermedades, el 75% provienen de animales. Esto muestra las estrechas relaciones entre la salud humana, animal y ambiental”, agrega.
Origen del Día de la Tierra
El Día de la Tierra se conmemora el 22 de abril de cada año. Fue instaurado en 1970 por el senador norteamericano Gaylord Nelson con el objetivo de crear una conciencia global sobre los problemas medioambientales como la contaminación, superpoblación y daños en la biodiversidad.
Ese año se realizó la primera manifestación alusiva a este día, promovida por Nelson, quien además de su cargo político era un activista ambiental. Su intención era presionar al gobierno de Estados Unidos para la creación de una agencia ambiental.
El congresista eligió el 22 de abril para facilitar la participación de académicos y estudiantes universitarios, ya que la semana del 19 al 25 de abril no coincidía con los exámenes finales o las vacaciones de primavera. A su vez, dicho día tampoco se topaba con alguna celebración religiosa.
Y su plan tuvo éxito, ya que esa primera convocatoria tuvo una gran respuesta, registrándose la participación de dos mil universidades, más de diez mil escuelas y centenares de comunidades.
La presión social finalmente rindió sus frutos, ya que en diciembre de 1970 se creó la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), cuya función es velar por que se cumplan los estándares nacionales bajo una variedad de leyes ambientales, en consulta con los gobiernos estatales, tribales y locales.
Posteriormente en 1972, se realizó la primera conferencia internacional sobre el medio ambiente, siendo la ciudad de Estocolmo, Suecia, su sede. La cumbre tuvo como objetivo sensibilizar a los líderes y mandatarios del mundo sobre la importancia de los problemas que amenazan al medio ambiente.
