Ética y transparencia de BioBioChile
VER RESUMEN
Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.
La turista chilena en Irán, Marcela Salinas, relató su experiencia en medio de la reciente escalada bélica entre Irán e Israel, declarando que se encontraba en Zahedan, a 800 kilómetros de Teherán, cuando se enteró de los bombardeos. A pesar de la tensión, mencionó que la vida en Irán seguía casi normal, con la gente asistiendo a mezquitas y realizando actividades cotidianas.
Marcela Salinas, una turista chilena en Irán abordó su experiencia ante la reciente escalada bélica y de violencia entre ese país con Israel: “Ha sido todo intenso, pero, dentro de todo, tranquilo”, dijo.
La mujer se encuentra de paso en territorio iraní, donde llegó hace diez días, para luego cruzar la frontera hacia Turquía.
Pese a no encontrarse en Teherán, la capital y ciudad más atacada por las fuerzas israelíes, comentó su experiencia tras la escalada de ataques entre ambos países.
“Tuve suerte. Estaba a 800 kilómetros de Teherán, en una ciudad que se llama Zahedan, en el sur. Me desperté el viernes en la mañana y, como tenemos siete horas de diferencia, me enteré por mi familia que me comenzó a mandar mensajes por WhatsApp. Ellos supieron antes que yo, porque en Zahedan no ha pasado nada, en ningún momento”, señaló.
En cuanto a cómo se viven los bombardeos en territorio iraní, sostuvo que algunos cayeron en “una central nuclear en el sur, como a medio camino de donde yo estaba”.
“Son punto estratégico, no son ciudades, salvo Teherán”, añadió.
En Irán “la gente hace su vida casi normal”
También, la chilena en Irán comentó que “la gente hace su vida casi normal”.
“Hemos estado con varios feriados y han estado llenas las mezquitas y la gente está en las calles, hace pícnic. Es de lo más normal, cosa que a mí me llamó la atención”, agregó.
Sin embargo, Salinas sostuvo también que cree que “están un poco asustados, pero a los extranjeros tratan de no trasmitirnos eso, porque es parte de su cultura, ser muy acogedores”.
“He conversado con muchas personas. Ellos, al principio, en general, si no te conocen, te dicen que está todo bien. Pero si empiezas a tener una relación con un poco más de confianza, te confiesan que están un poco asustados, porque ha durado mucho”.