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Las búsquedas en el celular de Manuel Monsalve, exsubsecretario del Interior imputado por violación y abuso sexual, revelaron un presunto interés en "damas de compañía" y mujeres colombianas. Se accedió a sitios como "rastro.com" y "ColombianCupid.com", incluso se intercambió mensajes con una joven de Medellín. El Gobierno mostró preocupación por el comportamiento inapropiado que habría tenido Monsalve, quien estaba a cargo de la seguridad del país. Políticos como Jaime Sáez lo criticaron, mientras expertos como Ignacio Pinto destacaron la gravedad del delito de trata de personas. Además, se descubrió que se buscó información sobre una droga asociada a agresiones sexuales.
Las búsquedas que fueron realizadas en el celular de Manuel Monsalve han generado un repudio político transversal contra el exsubsecretario del Interior, quien se encuentra imputado tras ser denunciado por los delitos de violación y abuso sexual.
Se trata de un análisis al teléfono de Monsalve, el cual estuvo enfocado en sus interacciones, incluso, de cuando era la segunda autoridad a cargo de la seguridad del país.
Así, según reveló T13, el 1 de septiembre del año pasado, el entonces subsecretario accedió 30 veces al portal “rastro.com”. Ese mismo día, según la denuncia en su contra, se habría registrado el primer presunto episodio de abuso hacia la subalterna que lo acusa: el beso a las afueras del Costanera Center.
En ese sitio web, Monsalve buscó “damas de compañía”.
Siete días después, la entonces autoridad ingresó a “ColombianCupid.com”, sitio que promete ayudar a hombres a encontrar una pareja colombiana. Allí, revisó 18 perfiles de mujeres entre 20 y 35 años, con búsquedas iniciadas a medianoche.
Además, la Policía de Investigaciones identificó mensajes de Monsalve con una joven de Medellín -entre el 26 de septiembre y el 10 de octubre de 2024-. A días de que ocurrieran los hechos denunciados por la funcionaria de Interior, Monsalve habría sostenido una conversación -vía chat- con una mujer llamada Silvia, de nacionalidad colombiana.
Repudio por búsquedas en celular de Monsalve
El último punto, en particular, fue observado con atención por el Gobierno, desde donde expresaron su molestia por el peligro que significaría poner en riesgo la función pública que se desempeñaba.
De hecho, en La Moneda, hablan de que si bien no ven delito en la materia -aún-, sí es impropio que una persona que está a cargo de dirigir la política contra la trata de personas y la explotación sexual, esté involucrada en servicios de esas características.
En ese sentido, el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, señaló que “hay ciertos deberes inherentes a la función pública”.
En la misma línea, desde la bancada del Frente Amplio, el diputado Jaime Sáez tildó a Monsalve de “degenerado”, apuntando a que incurrió en “el bajo mundo”.
Pero, la preocupación y sorpresa es transversal. El diputado Juan Manuel Fuenzalida (UDI) enfatizó en el rol que tenía Monsalve en ese entonces: estaba a cargo de la seguridad del país.
En tanto, el exfiscal Ignacio Pinto, académico de la Universidad Finis Terrae, planteó que el delito de trata de personas es un delito de alta gravedad en nuestro país.
“Que una alta autoridad pública encargada de la seguridad pública haya tenido algún tipo de contacto con una persona extranjera en el país, si bien en sí mismo no es delito, sí debe ser investigado efectivamente”, sostuvo.
Solicitud de licencia y droga asociada a agresiones sexuales
Otro punto relevante del análisis del teléfono de Monsalve es la licencia médica que le pidió a su hija para el 23 de septiembre, día después del episodio denunciado en el Hotel Panamericano.
A esto se suma la búsqueda realizada el 2 de octubre en el teléfono: GHB o Gamma Hidroxibutirato, una droga asociada a agresiones sexuales.
La PDI detectó que se hizo doble clic en páginas que explicaban cómo se suministra esta sustancia. De hecho, el informe cuestiona: “¿Por qué buscó insistentemente esta información?”.
Ante estos antecedentes, la exministra del interior, quien fue la superior de Manuel Monsalve, dijo estar sorprendida.