Las propias convicciones del mandatario, además de las pocas capacidades que han mostrado algunas personas que han sido designadas en diferentes cargos, como embajadores, han marcado la política exterior del gobierno.
La política exterior del Presidente Gabriel Boric ha sido uno de los aspectos más cuestionados de su gobierno, ya que se han registrado diversos impases a los largo de estos primeros dos años de gestión.
De esta manera, las propias convicciones del mandatario, además de las pocas capacidades que han mostrado algunas personas que han sido designadas en diferentes cargos, como embajadores, han marcado la política exterior.
Es más, Chile en estos momentos no cuenta con embajadores en Nueva Zelanda y el Reino Unido. En este último país, la vacante lleva vacía por más de seis meses, luego que la inexperimentada Susana Herrera utilizara su cargo para influenciar un proyecto personal.
Esta situación ha provocado incertidumbre en miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Francisco Chahuán (RN) explicó que “es fundamental apurar el nombramiento de algunos embajadores”, mientras que Iván Moreira (UDI) manifestó su preocupación porque es una “embajada muy importante”.
Asimismo, para la abogada Paz Zárate, investigadora senior de Athena Lab, explicó que “se trata de la plaza que, desde el punto de vista financiero, de inversiones, de defensa, y de formación de capital humano, es la más importante de Chile”.
Política exterior con Israel
Otro de los episodios que provocó múltiples reacciones y cuestionamientos a la política exterior del gobierno, fue la decisión del Presidente Gabriel Boric de excluir a las empresas israelíes de la Fidae 2024.
Ante ello, la senadora Paulina Vodanovic, presidenta del Partido Socialista, sostuvo que “la complejidad de las relaciones comerciales en materia de defensa, donde hay contratos vigentes, es difícil, y es una posición que no comparto”.
En la misma línea, el timonel del Partido por la Democracia, Jaime Quintana, comentó que “me preocupa porque nos estamos incluyendo en una nómina de países que, en definitiva, no quieren relacionarse con Israel”.
Por otra parte, el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, también ha sido cuestionado por mantenerse bajo perfil ante diversas situaciones. Es más, durante los últimos días se especuló con su renuncia, pero desde su círculo cercano desmintieron esta información.
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