Llegada de Elizalde a La Moneda: El duro golpe al FA y la eventual autodesignación de Vodanovic

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Álvaro Elizalde asumió como el nuevo ministro de la Secretaría General de la Presidencia, luego que el presidente Gabriel Boric aceptara la renuncia de Ana Lya Uriarte, quien se encontraba en medio de una larga licencia médica. La llegada del ahora exsenador es un duro golpe para el Frente Amplio y el Partido Comunista, pero también abre la interrogante por quién será su reemplazante en la Cámara Alta.

El lunes pasado Ana Lya Uriarte había extendido su licencia, en medio de trascendidos que apuntaban a que estaría ausente por una semana más, debido a su delicado estado de salud tras contraer covid-19.

De acuerdo a la información que se maneja, Uriarte habría dejado en manos del presidente Gabriel Boric su situación, y el mandatario finalmente tomó la decisión de aceptar su renuncia.

La política exige presencia y el Gobierno tiene además temas urgentes en materia legislativa, por lo que rápidamente se nominó a Álvaro Elizalde como nuevo titular de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres).

Vodanovic, la eventual autodesignada para reemplazar a Elizalde en el Senado

Así, de senador pasó a ser ministro, una práctica que ha sido criticada por el hecho que los parlamentarios son elegidos por la ciudadanía, no así los secretarios de Estado, en medio además de la ausencia de mecanismos democráticos establecidos para elegir a sus reemplazantes.

Y aquí otra voltereta del Gobierno, cuyos integrantes habían sido duros críticos de este tipo de decisiones. De hecho, aún está en la retina el round que protagonizaron Camila Vallejo y Ena Von Baer cuando la entonces diputada comunista le llamó “senadora designada”, en noviembre de 2011.

Quizá como anécdota, a estas alturas, con este cambio el gabinete ya no será paritario, algo que reconoció la ministra de la Mujer, Antonia Orellana.

Así las cosas, queda abierta la interrogante sobre quién reemplazará a Elizalde, a quien le quedaban dos años más como senador por la región del Maule.

Se dice que Paulina Vodanovic, actual presidenta del Partido Socialista, sería la primera opción y todo indica que así será, en una negociación prácticamente a puertas cerradas, donde quienes votaron por Elizalde poco y nada podrán decir.

Pero además, se podría incluso hablar de una especie de conflicto de interés para asumir, dado que Vodanovic es la timonel del PS, y será junto a su directiva que definirá el reemplazante en el Senado, una especie de autodesignación.

El duro golpe al Frente Amplio y al PC

De todas maneras, existen otras señales con la llegada de Elizalde a la Segpres y al comité político, por la necesidad urgente que tiene el presidente Boric de personas con buenas relaciones en el Congreso.

Recordemos que Ana Lya Uriarte reemplazó a Giorgio Jackson, justamente porque el frenteamplista no era querido en el Congreso. Incluso, a su llegada, la ahora exministra fue recibida en la calle por parlamentarios del oficialismo.

La señal, por tanto, más allá que se trate de un ministerio asignado tácitamente al PS, es que Boric está optando por Socialismo Democrático, en desmedro de Apruebo Dignidad, desde cuyas filas nunca hubo un nombre que pudiera salir a “competir” el cargo.

Cada vez más, el Frente Amplio y el Partido Comunista han debido ir cediendo espacios frente a Socialismo Democrático, porque la realidad se está imponiendo, sumado a las elecciones del 7 de mayo, y la necesidad de mostrar moderación.

También, en medio de la necesidad de depurar el programa de Gobierno, pasarlo por un cedazo, para dejar aquellas ideas que sean realizables, tesis que es defendida por Álvaro Elizalde.

Por lo mismo, la gran duda es si este último logrará una disciplina partidaria en el Congreso, especialmente con los díscolos de Apruebo Dignidad, algo que no consiguió Ana Lya Uriarte.

Así también, su otro gran desafío será intentar romper la decisión de la oposición de discutir todos los grandes temas como una sola negociación, como seguridad, salud, previsión y royalty minero, además de la reforma tributaria.

Aunque, es notorio que Elizalde tiene más peso político que Uriarte, con mayor llegada a los senadores, a quienes conoce muy bien.

Queda en el aire, finalmente, si con esta decisión, el presidente Gabriel Boric tomó una decisión respecto hacia dónde irán las cosas o simplemente es un movimiento táctico.

En La Moneda, al menos, se decía en los pasillos que se trató de un cambio por “fuerza mayor”, con todas las connotaciones que eso tiene.

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Álvaro Elizalde asumió como el nuevo ministro de la Secretaría General de la Presidencia, luego que el presidente Gabriel Boric aceptara la renuncia de Ana Lya Uriarte, quien se encontraba en medio de una larga licencia médica. La llegada del ahora exsenador es un duro golpe para el Frente Amplio y el Partido Comunista, pero también abre la interrogante por quién será su reemplazante en la Cámara Alta.

El lunes pasado Ana Lya Uriarte había extendido su licencia, en medio de trascendidos que apuntaban a que estaría ausente por una semana más, debido a su delicado estado de salud tras contraer covid-19.

De acuerdo a la información que se maneja, Uriarte habría dejado en manos del presidente Gabriel Boric su situación, y el mandatario finalmente tomó la decisión de aceptar su renuncia.

La política exige presencia y el Gobierno tiene además temas urgentes en materia legislativa, por lo que rápidamente se nominó a Álvaro Elizalde como nuevo titular de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres).

Vodanovic, la eventual autodesignada para reemplazar a Elizalde en el Senado

Así, de senador pasó a ser ministro, una práctica que ha sido criticada por el hecho que los parlamentarios son elegidos por la ciudadanía, no así los secretarios de Estado, en medio además de la ausencia de mecanismos democráticos establecidos para elegir a sus reemplazantes.

Y aquí otra voltereta del Gobierno, cuyos integrantes habían sido duros críticos de este tipo de decisiones. De hecho, aún está en la retina el round que protagonizaron Camila Vallejo y Ena Von Baer cuando la entonces diputada comunista le llamó “senadora designada”, en noviembre de 2011.

Quizá como anécdota, a estas alturas, con este cambio el gabinete ya no será paritario, algo que reconoció la ministra de la Mujer, Antonia Orellana.

Así las cosas, queda abierta la interrogante sobre quién reemplazará a Elizalde, a quien le quedaban dos años más como senador por la región del Maule.

Se dice que Paulina Vodanovic, actual presidenta del Partido Socialista, sería la primera opción y todo indica que así será, en una negociación prácticamente a puertas cerradas, donde quienes votaron por Elizalde poco y nada podrán decir.

Pero además, se podría incluso hablar de una especie de conflicto de interés para asumir, dado que Vodanovic es la timonel del PS, y será junto a su directiva que definirá el reemplazante en el Senado, una especie de autodesignación.

El duro golpe al Frente Amplio y al PC

De todas maneras, existen otras señales con la llegada de Elizalde a la Segpres y al comité político, por la necesidad urgente que tiene el presidente Boric de personas con buenas relaciones en el Congreso.

Recordemos que Ana Lya Uriarte reemplazó a Giorgio Jackson, justamente porque el frenteamplista no era querido en el Congreso. Incluso, a su llegada, la ahora exministra fue recibida en la calle por parlamentarios del oficialismo.

La señal, por tanto, más allá que se trate de un ministerio asignado tácitamente al PS, es que Boric está optando por Socialismo Democrático, en desmedro de Apruebo Dignidad, desde cuyas filas nunca hubo un nombre que pudiera salir a “competir” el cargo.

Cada vez más, el Frente Amplio y el Partido Comunista han debido ir cediendo espacios frente a Socialismo Democrático, porque la realidad se está imponiendo, sumado a las elecciones del 7 de mayo, y la necesidad de mostrar moderación.

También, en medio de la necesidad de depurar el programa de Gobierno, pasarlo por un cedazo, para dejar aquellas ideas que sean realizables, tesis que es defendida por Álvaro Elizalde.

Por lo mismo, la gran duda es si este último logrará una disciplina partidaria en el Congreso, especialmente con los díscolos de Apruebo Dignidad, algo que no consiguió Ana Lya Uriarte.

Así también, su otro gran desafío será intentar romper la decisión de la oposición de discutir todos los grandes temas como una sola negociación, como seguridad, salud, previsión y royalty minero, además de la reforma tributaria.

Aunque, es notorio que Elizalde tiene más peso político que Uriarte, con mayor llegada a los senadores, a quienes conoce muy bien.

Queda en el aire, finalmente, si con esta decisión, el presidente Gabriel Boric tomó una decisión respecto hacia dónde irán las cosas o simplemente es un movimiento táctico.

En La Moneda, al menos, se decía en los pasillos que se trató de un cambio por “fuerza mayor”, con todas las connotaciones que eso tiene.