La Moneda se desmarcó del llamado que realizó a Carabineros la diputada Maite Orsini de RD

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La Moneda se desmarcó del llamado que realizó -a Carabineros- la diputada de Revolución Democrática, Maite Orsini, por un procedimiento de control de identidad contra el exfutbolista Jorge Valdivia.

La parlamentaria se autodenunció, pero -de todas formas- la situación generó ruido al interior de su partido, donde realizaron una tibia defensa.

La Fiscalía Nacional, en tanto, requirió un informe, mientras que la funcionaria que habló con la legisladora descartó cualquier tipo de irregularidades y sostuvo que los contactos con autoridades son algo frecuente.

La situación -que comenzó siendo de farándula- se tomó espacios del mundo político. Todo inició en redes sociales, en donde se vinculó a la diputada de RD, Maite Orsini, con el exfutbolista Jorge Valdivia.

Pero, la situación dio un giro hacia lo judicial y lo político.

El hecho se remonta al 25 de enero, cuando el exfutbolista trotaba por Vitacura, momento en que una patrulla de Carabineros le realizó un control de identidad. El ahora comentarista deportivo no traía consigo su carnet de identidad y luego de una discusión, fue esposado y llevado como detenido.

“Es el mago Valdivia”, dijeron algunos uniformados, ya en la comisaría, y después de confirmar su identidad fue liberado, aunque la situación lo molestó.

Acto seguido, el ex seleccionado llamó a Orsini y acusó que el arresto no se ajustaba a derecho, y que se había tratado de un apremio ilegítimo, por lo que pensaba querellarse contra Carabineros, según consignó el diario La Tercera.

De acuerdo al entorno de Orsini, la diputada buscaba que el tema no escalara a mayores, por lo que decidió llamar directamente a la jefa de la Dirección de Derechos Humanos de Carabineros, la general Karina Soza, para manifestar esta molestia por el procedimiento.

Para aclarar que no hubo nada irregular, Maite Orsini se autodenunció. Y para el Gobierno, esa es la vía que debe despejar lo ocurrido.

Así lo expresaron la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, y la jefa de la Segpres, Ana Lya Uriarte, quienes tomaron distancia del telefonazo, condenando -eso sí- las amenazas e insultos que ha recibido la legisladora.

La situación generó molestia en la interna de RD y la defensa fue tibia. Y pese a que el presidente del partido, Juan Ignacio Latorre, valoró que la diputada se haya autodenunciado, aseguró que el llamado a Carabineros no es algo que él haría.

El caso abrió el debate respecto de la procedencia del llamado, y también llamó la atención la autodenuncia, que puede realizarla cualquier ciudadano.

El fiscal nacional, Ángel Valencia, requirió un informe para solicitar más antecedentes.

Ayer el diputado UDI, Jorge Alessandri, señaló que es importante esclarecer los hechos, por lo que enviarán los antecedentes a la comisión de Ética de la Cámara.

Las opiniones en la Cámara son diversas. Por ejemplo, la diputada Ana María Gazmuri aseguró que Maite Orsini se apegó a derecho, ya que -según le consta- Carabineros no habría realizado bien el requerimiento.

El senador Matías Walker, en tanto, explicó parte de la legislación sobre el control de detención.

La diputada RN, Ximena Ossandón, compartió con Orsini en la comisión de la Mujer de la Cámara. Ya la he defendido en otras oportunidades, dijo la legisladora, insinuando que en este caso se pasó de la raya.

Así, transparentó ciertas acciones a las que deben enfrentarse los propios diputados y diputadas.

La generala que habló con Maite Orsini, la generala Karina Soza, jefa de la Dirección de Derechos Humanos de Carabineros, afirmó -a La Tercera- que no hubo nada irregular en la llamada y sostuvo que este tipo de contactos, con distintas autoridades, es algo frecuente.

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La Moneda se desmarcó del llamado que realizó -a Carabineros- la diputada de Revolución Democrática, Maite Orsini, por un procedimiento de control de identidad contra el exfutbolista Jorge Valdivia.

La parlamentaria se autodenunció, pero -de todas formas- la situación generó ruido al interior de su partido, donde realizaron una tibia defensa.

La Fiscalía Nacional, en tanto, requirió un informe, mientras que la funcionaria que habló con la legisladora descartó cualquier tipo de irregularidades y sostuvo que los contactos con autoridades son algo frecuente.

La situación -que comenzó siendo de farándula- se tomó espacios del mundo político. Todo inició en redes sociales, en donde se vinculó a la diputada de RD, Maite Orsini, con el exfutbolista Jorge Valdivia.

Pero, la situación dio un giro hacia lo judicial y lo político.

El hecho se remonta al 25 de enero, cuando el exfutbolista trotaba por Vitacura, momento en que una patrulla de Carabineros le realizó un control de identidad. El ahora comentarista deportivo no traía consigo su carnet de identidad y luego de una discusión, fue esposado y llevado como detenido.

“Es el mago Valdivia”, dijeron algunos uniformados, ya en la comisaría, y después de confirmar su identidad fue liberado, aunque la situación lo molestó.

Acto seguido, el ex seleccionado llamó a Orsini y acusó que el arresto no se ajustaba a derecho, y que se había tratado de un apremio ilegítimo, por lo que pensaba querellarse contra Carabineros, según consignó el diario La Tercera.

De acuerdo al entorno de Orsini, la diputada buscaba que el tema no escalara a mayores, por lo que decidió llamar directamente a la jefa de la Dirección de Derechos Humanos de Carabineros, la general Karina Soza, para manifestar esta molestia por el procedimiento.

Para aclarar que no hubo nada irregular, Maite Orsini se autodenunció. Y para el Gobierno, esa es la vía que debe despejar lo ocurrido.

Así lo expresaron la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, y la jefa de la Segpres, Ana Lya Uriarte, quienes tomaron distancia del telefonazo, condenando -eso sí- las amenazas e insultos que ha recibido la legisladora.

La situación generó molestia en la interna de RD y la defensa fue tibia. Y pese a que el presidente del partido, Juan Ignacio Latorre, valoró que la diputada se haya autodenunciado, aseguró que el llamado a Carabineros no es algo que él haría.

El caso abrió el debate respecto de la procedencia del llamado, y también llamó la atención la autodenuncia, que puede realizarla cualquier ciudadano.

El fiscal nacional, Ángel Valencia, requirió un informe para solicitar más antecedentes.

Ayer el diputado UDI, Jorge Alessandri, señaló que es importante esclarecer los hechos, por lo que enviarán los antecedentes a la comisión de Ética de la Cámara.

Las opiniones en la Cámara son diversas. Por ejemplo, la diputada Ana María Gazmuri aseguró que Maite Orsini se apegó a derecho, ya que -según le consta- Carabineros no habría realizado bien el requerimiento.

El senador Matías Walker, en tanto, explicó parte de la legislación sobre el control de detención.

La diputada RN, Ximena Ossandón, compartió con Orsini en la comisión de la Mujer de la Cámara. Ya la he defendido en otras oportunidades, dijo la legisladora, insinuando que en este caso se pasó de la raya.

Así, transparentó ciertas acciones a las que deben enfrentarse los propios diputados y diputadas.

La generala que habló con Maite Orsini, la generala Karina Soza, jefa de la Dirección de Derechos Humanos de Carabineros, afirmó -a La Tercera- que no hubo nada irregular en la llamada y sostuvo que este tipo de contactos, con distintas autoridades, es algo frecuente.