Efemérides: El 12 de mayo de 1551 se funda la Universidad de San Marcos de Lima

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El 12 de mayo de 1551 la corona española firmó el acta en virtud de la cual se fundó la real y pontificia Universidad de San Marcos de Lima, la primera institución de este tipo en América por una real cédula expedida por el Rey Carlos V.

Ese documento es en suma el acto oficial con el que empieza la vida universitaria en Perú y todo el continente.

Cuando se produjo la invasión hispánica, Francisco Pizarro tanto en Jauja en 1533 como en Lima dos años después, escogió sitio para edificar la futura universidad.

Una iniciativa no concretada de inmediato ya por las continuas guerras con los indios, por las alteraciones de traidores y guerras civiles.

Sin embargo, el punto de partido básico estuvo dado por la urgencia necesidad eclesiástica de preparar a los religiosos en teología y filosofía, evitando de esta manera interpretaciones heterodoxas por ignorancia o subjetividad.

La iniciación de los estudios superiores estuvo a cargo de los dominicos, la primera orden llegada al Perú.

Primero en 1548 pidieron fundar una universidad en Lima y esa iniciativa eclesiástica fue seguida de un poderoso impulso laico amparado por el cabildo de Lima que nominó como procuradores de la ciudad ante la Corona, a dos de sus personajes más representativos, el eclesiástico dominico Fray Tomás de San Martín y el Capitán Jerónimo de Aliaga.

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El 12 de mayo de 1551 la corona española firmó el acta en virtud de la cual se fundó la real y pontificia Universidad de San Marcos de Lima, la primera institución de este tipo en América por una real cédula expedida por el Rey Carlos V.

Ese documento es en suma el acto oficial con el que empieza la vida universitaria en Perú y todo el continente.

Cuando se produjo la invasión hispánica, Francisco Pizarro tanto en Jauja en 1533 como en Lima dos años después, escogió sitio para edificar la futura universidad.

Una iniciativa no concretada de inmediato ya por las continuas guerras con los indios, por las alteraciones de traidores y guerras civiles.

Sin embargo, el punto de partido básico estuvo dado por la urgencia necesidad eclesiástica de preparar a los religiosos en teología y filosofía, evitando de esta manera interpretaciones heterodoxas por ignorancia o subjetividad.

La iniciación de los estudios superiores estuvo a cargo de los dominicos, la primera orden llegada al Perú.

Primero en 1548 pidieron fundar una universidad en Lima y esa iniciativa eclesiástica fue seguida de un poderoso impulso laico amparado por el cabildo de Lima que nominó como procuradores de la ciudad ante la Corona, a dos de sus personajes más representativos, el eclesiástico dominico Fray Tomás de San Martín y el Capitán Jerónimo de Aliaga.