Ética y transparencia de BioBioChile
En Causa y Efecto conversamos cómo las investigaciones por corrupción han comenzado a usar las mismas herramientas intrusivas aplicadas a causas de narcotráfico: escuchas telefónicas, seguimientos y análisis de mensajería.
Ese punto abre la duda sobre por qué el conservador de Puente Alto (envuelto en la trama bielorrusa), acumulaba tantas llamadas intervenidas por red fija, y la explicación apunta a los trayectos sin señal donde recurría al teléfono tradicional para conversar sobre distintos temas.
En el dialogo se detallan que esas conversaciones derivaron en informes del OS7 que hoy salpican a nuevas figuras, entre ellas el diputado republicano Cristián Araya.
Las escuchas lo mencionan en contactos con Sergio Llaver para influir en la acusación constitucional contra Antonio Ulloa, con supuestos pagos y reuniones que ahora deberán ser esclarecidas.
Aunque Araya niega vínculos, los registros mencionan encuentros, comunicaciones y datos compartidos.
Además se subraya que el caso sigue desplegando nuevas aristas y nombres del poder político y judicial, incluida la referencia al ministro Mauricio Silva en gestiones para respaldar a Verónica Sabaj.
La preocupación es que, como ha ocurrido en otras causas, todo termine diluido entre contradicciones y relatos imprecisos.
La demanda central apunta a que la fiscalía acelere diligencias y determine qué parte de estas escuchas constituye evidencia real y cuáles son simples exageraciones de los involucrados.
