Lanzan sitio web de la fotonovela chilena

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El jueves 8 de octubre, a las 18.30 horas, en la Sala América de la Biblioteca Nacional, se inaugura esta plataforma que rescata el valor patrimonial de las revistas que publicaban historias fotografiadas producidas en nuestro país y que se convirtieron en una relevante industria cultural.

Con la televisión recién debutando, el cine en declive y la radio reinventándose, la fotonovela asumió la vanguardia en cuanto a popularidad y masividad en la década de los sesenta, sitial que más tarde fue ocupado por la televisión.

Las historias fotografiadas, además de los contenidos propios de un producto seriado, entregan valiosa información sobre el modo de hablar, el diseño y los paradigmas sociales que fueron evolucionando durante un periodo de la historia nacional marcado por las transformaciones.

La industria chilena de las fotonovelas produjo una docena de revistas, con más o menos éxito, que interpretadas en la actualidad se convierten en una vertiente inagotable de este tramo no revelado del acervo visual criollo.
A través de www.fotonovelachilena.cl se conocerá más de este formato editorial híbrido que aglutina talentos de diferente procedencia, funcionales a la provisión de historias para las revistas que compartían espacio, en los quioscos, con otras publicaciones periodísticas y magazinescas.

“Las fotonovelas se convirtieron entonces en las preteleseries porque fue en las revistas donde los elencos se foguearon, aunque el símil que se hace respecto del formato -que se trataba de cine estático- fue más bien un voluntarismo incentivado por el entusiasmo del éxito inmediato”, explica Fabián Llanca, responsable del proyecto que cuenta con financiamiento del Consejo Nacional de la Cultura, a través de la convocatoria 2014 del Fondart.

Una descripción de esta nueva herramienta digital y una performance inspirada en la época de oro de las fotonovelas chilenas incluirá el lanzamiento del proyecto, programado para este jueves 8 de octubre, a las 18.30 horas, en la Sala América de la Biblioteca Nacional, Moneda 650.

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El jueves 8 de octubre, a las 18.30 horas, en la Sala América de la Biblioteca Nacional, se inaugura esta plataforma que rescata el valor patrimonial de las revistas que publicaban historias fotografiadas producidas en nuestro país y que se convirtieron en una relevante industria cultural.

Con la televisión recién debutando, el cine en declive y la radio reinventándose, la fotonovela asumió la vanguardia en cuanto a popularidad y masividad en la década de los sesenta, sitial que más tarde fue ocupado por la televisión.

Las historias fotografiadas, además de los contenidos propios de un producto seriado, entregan valiosa información sobre el modo de hablar, el diseño y los paradigmas sociales que fueron evolucionando durante un periodo de la historia nacional marcado por las transformaciones.

La industria chilena de las fotonovelas produjo una docena de revistas, con más o menos éxito, que interpretadas en la actualidad se convierten en una vertiente inagotable de este tramo no revelado del acervo visual criollo.
A través de www.fotonovelachilena.cl se conocerá más de este formato editorial híbrido que aglutina talentos de diferente procedencia, funcionales a la provisión de historias para las revistas que compartían espacio, en los quioscos, con otras publicaciones periodísticas y magazinescas.

“Las fotonovelas se convirtieron entonces en las preteleseries porque fue en las revistas donde los elencos se foguearon, aunque el símil que se hace respecto del formato -que se trataba de cine estático- fue más bien un voluntarismo incentivado por el entusiasmo del éxito inmediato”, explica Fabián Llanca, responsable del proyecto que cuenta con financiamiento del Consejo Nacional de la Cultura, a través de la convocatoria 2014 del Fondart.

Una descripción de esta nueva herramienta digital y una performance inspirada en la época de oro de las fotonovelas chilenas incluirá el lanzamiento del proyecto, programado para este jueves 8 de octubre, a las 18.30 horas, en la Sala América de la Biblioteca Nacional, Moneda 650.