Se vienen las Fiestas Patrias en nuestro país, sin duda la fecha más esperada y celebrada por los chilenos. Este año tiene un tinte especial, debido a que existirán más libertades en el contexto de la pandemia.
No cabe duda que lo principal para estas fiestas siempre es la comida en la mesa, ya que sale a relucir lo mejor de la gastronomía nacional, como las empanadas, sopaipillas, carne asada y un largo etcétera.
No obstante, el debate se abre cuando se juntan los puristas de la comida chilena con aquellos que buscan innovar en ella. En el primer lugar están esos que prefieren lo clásico, sin ningún tipo de cambios; mientras que también existen quienes buscan darle un toque distinto a los alimentos, sin perder las costumbres y tradiciones.
Es así como constantemente vemos en internet discusiones sobre si algunas comidas chilenas deberían ser solas o con acompañamientos. Ejemplos hay por montones y aquí te dejamos algunos.
Choripán con mayonesa o ketchup: He aquí el gran invitado de los asados en familia, el entremés ideal antes de pasar al plato de fondo con las correspondientes ensaladas.
La tradición indica que el choripán consta simplemente de un pan marraqueta con un embutido en su interior, sea longaniza o chorizo. Sin embargo, la discusión comienza cuando algunas personas agregan salsas típicas, como mayonesa, kétchup o mostaza.
Al respecto, muchos aseguran que los aderezos le entregan un mejor sabor al choripán, mientras que los ‘clásicos’ dejan entrever que aquello es casi una ofensa y que “mientras mayor sea la simpleza, mejor es el producto”.
Empanadas de pino con ¿pollo?: Si bien las empanadas de pollo ingresaron al mercado nacional con fuerza hace algunos años, aún existen personas que se resisten a tenerlas como opción en Fiestas Patrias.
Aquí nuevamente se entra en el debate entre ‘tradicionalistas’ y ‘rupturistas’, ya que los primeros no conciben que las empanadas de pino sean sin carne de vacuno, más aún en septiembre, cuando la ingesta de esta proteína se eleva hasta ‘las nubes’.
Puede decirse que, muy probablemente, la empanada de pollo surgió como una opción algo más saludable para compartir en familia, la cual durante los últimos años se hizo común entre los clanes, sea en el almuerzo o la ‘once’. No obstante, aún existe debate sobre si es la mejor opción durante este periodo ¿Tú que opinas?
Pebre con tomate: Se trata de una de las salsas tradicionales más comunes en Chile y lo cierto es que su preparación nunca genera consenso al interior de las familias.
Está el pebre cuchareado, con tomate, con ají cacho de cabra, pebre del sur, verde o el típico Chancho en Piedra. Todos ellos tienen una base en común, pero los condimentos siempre generan algo de discusión.
Y, por cierto, estas generalmente enfrentan a los puristas que prefieren la salsa únicamente con cilantro, cebolla, ajo y ají, mientras que otros le incluyen el tomate. A juicio de muchos esta segunda es la ideal, aunque… nunca se sabe.
Sopaipilla con…. cualquier cosa: Puede decirse que la sopaipilla es una de las muestras más tradicionales de la mesa chilena, por su exquisito sabor y simpleza.
A juicio de muchos estas se deben comer solas, acompañadas por una bebida caliente, e idealmente en días cuando hace mucho frío o llueve. Sin embargo, nuevamente los aderezos generan disputas interminables.
Están por ejemplo las sopaipillas con mostaza o kétchup, un clásico de los universitarios cuando salen de clases, o aquellas personas que las prefieren con miel a la hora de ‘once’. Esta última es una situación cada vez más común.
Por último, aunque suene inverosímil, en redes sociales también se han visto reportes de quienes las comen acompañadas con manjar, en una mezcla que claramente es poco común ¿Tú qué opinas?
Humitas con azúcar: Si bien no son una comida tradicional para el ’18’, las humitas también son parte de la mesa tradicional chilena, siendo un reflejo de las tradiciones del campo.
Si bien estas también son simples de cocinar, existe un debate abierto en la actualidad respecto a cómo deben servirse. Al igual que en los otros casos están los ‘puristas’ que las comen solas, otros que les agregan azúcar para darle mejor sabor o quienes las prefieren con tomate.
Muchas personas coinciden en que el azúcar quita las propiedades nutricionales y el sabor característico de la humita, mientras que otros defienden su inclusión asegurando que son mejores cuando están ‘agridulces’.
Bueno, como ya se ha dicho por muchos años, “en gustos no hay nada escrito”, tanto en el amor como a la hora de degustar algún plato. Para ti ¿Qué comidas o mezclas te parecen una aberración?