Los incendios forestales son un riesgo latente durante esta temporada, y el fuego no es lo único peligroso de este siniestro, también lo es la intoxicación por el humo.

El humo de un incendio irrita las vías respiratorias y mucosas, producto de los gases tóxicos que pueden dañar los ojos, irritar el sistema respiratorio y empeorar la condición de salud de las personas que padecen problemas cardíacos, pulmonares y respiratorios.

Es por esto que es muy importante saber qué hacer si te encuentras cerca de estas nubes tóxicas.

¿Qué hacer si estoy cerca del humo de un incendio forestal?

En caso de que el humo llegue hasta tu casa, se recomienda:

– Evitar actividades deportivas
– Cerrar puertas y ventanas para impedir que ingrese el humo. Si es necesario, utiliza paños húmedos para mejorar el sello de ventanas o puertas.
– Evitar fumar, prender velas, inciensos y cualquier otro tipo de material que produzca humo.
– Para embarazadas, niños, adultos mayores, asmáticos y personas con alguna enfermedad pulmonar, es recomendable trasladarse a una zona menos contaminada.
– Seguir las recomendaciones de las autoridades.

¿Cuáles son los síntomas de intoxicación por humo?

Algunos de los síntomas con los que puedes saber si el humo te está afectando, son:

– Tos con o sin mucosidad
– Ardor en los ojos
– Garganta irritada
– Dificultad para respirar
– Latido acelerado
– Dolor de pecho
– Dolor de cabeza

Si presentas síntomas, consulta a un centro de salud, sigue las instrucciones de la autoridad a cargo para acceder a atención de salud, o llama a Salud Responde al 600-360-7777 para recibir orientación.

Recuerda que si detectas un incendio forestal, debes llamar al número 130 para comunicarte directamente con la central de CONAF.