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Alternativas de fertilidad para parejas del mismo género: nuevas formas de hacer familia

28 octubre 2025 | 16:43

El avance de las técnicas de reproducción asistida permite a parejas del mismo género cumplir su deseo de tener hijos biológicos. Sin embargo, la maternidad subrogada es un debate pendiente.

Cada vez más parejas del mismo género en Chile buscan formar familias con hijos biológicos. Sin embargo, las rutas hacia la maternidad o paternidad siguen siendo diversas y, en algunos casos, complejas.

Según el estudio Somos Familia (2022) de Fundación Iguales, un 48% de familias homoparentales y lesbomaternales han tenido hijos o hijas a través de coito heterosexual. No obstante, un 19,4% lo ha hecho a través de inseminación artificial y un 10,1% con fecundación in vitro.

Estas dos últimas opciones corresponden a técnicas de reproducción asistida, alternativas cada vez más elegidas para tener hijos biológicos.

Familias homoparentales

Cuando la pareja está compuesta por dos hombres, las posibilidades biológicas se limitan a la maternidad subrogada.

Esta práctica consiste en que una mujer se embaraza del hijo de otra persona. El embrión es producto de la unión de un ovocito donado con el espermatozoide de uno de los padres, o proveniente de un banco de esperma.

“Actualmente, en Chile no tenemos una ley de subrogación o de embarazo subrogado, por lo tanto, el problema es que, como en la legislación chilena el código dice que la mujer que pare es la madre, no hay cómo entregar ese recién nacido a los padres”, explicó Pablo Hernández-Rudnick, médico especialista en fertilidad, en conversación con BioBioChile.

Según indica, en Colombia y Estados Unidos esta práctica es habitual y seria. “Se ocupan ovocitos de una donante, conocida o desconocida. Se generan los embriones y esos embriones se transfieren al útero de la mujer que va a hacer la subrogación”, reiteró el médico.

Otra opción es la adopción, una vía válida y significativa para formar una familia, aunque no implique un vínculo biológico. De acuerdo a Fundación Iguales, un 2% de las parejas homoparentales y lesbomaternales incorporaron un hijo a su familia por adopción.

Familias lesbomaternales

Para las parejas lesbomaternales, es decir, conformadas por dos personas que se identifican con el género femenino, el abanico de opciones es amplio.

La doctora Adela Camus, especialista en fertilidad y medicina reproductiva, señala que, si bien no es el ideal para muchas pacientes, siempre está sobre la mesa que alguna de ellas logre embarazo al tener relaciones sexuales con un hombre.

Ahora bien, en cuanto a técnicas de fertilidad asistida, pueden optar a tratamientos de baja complejidad, como la inseminación intrauterina, o de alta complejidad, como la fecundación in vitro. En ambos casos, la pareja debe decidir, tras una orientación médica, quién es más apta para un embarazo.

También existe el método ROPA (Recepción de Ovocitos de la Pareja), una alternativa que involucra a la pareja por completo: una de ellas aporta los óvulos y la otra se embaraza a través de fecundación in vitro, utilizando esperma de un donante.

“A una de ellas se le estimulan los ovarios, se le sacan los ovocitos y se generan los embriones. Los embriones se transfieren a la otra mujer de la pareja. Por lo tanto, genéticamente ese embrión va a tener genes de la portadora de sus ovocitos, la otra mujer va a embarazarse y después va a parir”, profundizó el doctor Hernández-Rudnick.

Para decidir los roles en el proceso, se estudiará la reserva y calidad ovárica de cada una, así como la salud general para un eventual embarazo, descartando enfermedades de base.

“A veces vienen con una idea preconcebida, pero a veces quien quiere ser la gestante tiene mejor reserva ovárica que la donante. Uno tiene que hacer una evaluación”, precisó la doctora Camus.

Este método fue utilizado por 8,1% de la población estudiada por Fundación Iguales en 2022.