La Asociación de Municipalidades de Chile (Amuch), junto a jefes comunales de oposición de la región Metropolitana, criticaron al Gobierno por “no dar soluciones” a las isapres.

En concreto porque -según acusan- en caso de quebrar las aseguradoras, el traspaso a Fonasa generará una presunta hecatombe en el sistema público, teniendo que incluir a 3 millones de usuarios. En total, serían 15 millones.

Sobre eso, las autoridades sostuvieron que la lista de espera vigente aumentará y que quienes necesitaban atenderse por algún procedimiento vital perderán la vida, acrecentando la tasa de mortalidad.

En ese sentido, la alcaldesa Evelyn Matthei hizo alusión al caso de un paciente con cáncer que no sabrá qué será de él una vez se traspase a Fonasa.

Desde La Florida, el alcalde Rodolfo Carter afirmó que dejar morir a quienes están en lista de espera es un acto criminal y que como comuna están dispuestos a hacer las demandas pertinentes al Ejecutivo.

Por su parte, la exsubsecretaria de Salud, Paula Daza, emplazó a la ministra de Salud, Ximena Aguilera, a aprobar la ley corta de isapres y a terminar con las preexistencias y declaraciones de salud.

Recordemos que a raíz de la ley corta de isapres, la deuda de las aseguradores se recalculó de 1.400 millones de dólares a 1.180.

Aún así, la cifra podría volver a cambiar dependiendo de las indicaciones que haga el Gobierno y la Comisión de Salud del Senado.