Evanyely Zamorano y Emanuel Pacheco, apelaron a la resolución de la Superintendencia de Educación (Supereduc) que presentaron a partir del suicidio de su hija, Katy Winter, el 22 de mayo de 2018.
En respuesta, la Superintendencia estableció ‘recomendaciones’ al Colegio Nido de Águilas por el maltrato psicológico a través de Internet, la cual dio orientaciones a mejorar sus canales de denuncia, protocolo a seguir y las sanciones para quienes cometen bullying y ciberacoso.
Frente a esta primera resolución, los padres de Katy buscan esclarecer que algunas conductas precedentes no han sido tomadas en cuenta por el Colegio Nido de Águilas donde iba la joven, según lo que consignó La Tercera
Estas conductas precedentes se constataron tras revelar dos páginas de confesiones de alumnos del establecimiento que siguen vigentes. En las páginas creadas en 2013 y 2015, se publican mensajes ofensivos y de maltrato explícito hacia diferentes alumnos.
Exactamente en este tipo de páginas, la joven que se suicidó en una cafetería de Providencia, fue víctima de ciberacoso y chantaje por parte de otros alumnos tan solo 48 horas antes del incidente.
La Superintendencia se refirió a que el caso no se cierra hasta que se resuelve el último recurso presentado, por lo que “el procedimiento sigue abierto para continuar con los procesos de investigación”.
Por su parte, el Colegio Nido de Águilas informó que no han sido notificados de los últimos antecedentes.
Los padres de la joven y creadores de la Fundación Katy Summer contra el cyberbullying, a partir de esto buscan que se apliquen medidas más severas en conjunto con el Ministerio de Educación contempladas en la Ley 20.536 sobre Violencia Escolar, la cual está vigente desde 2011.
El problema en la indagatoria es que, según comentaron Zamorano y Pacheco, Chile aún no está penalizado el bullying.