Moussa Niakhate pidió permiso para alimentarse en medio del partido entre el Augsburg y el Mainz, en el contexto del Ramadán que cumplen los musulmanes.

En el partido entre el Augsburg y el Mainz ocurrió un hecho que llamó la atención porque pocas veces se había visto en una cancha de fútbol a nivel profesional. En la Bundesliga se detuvo un partido para que uno de los jugadores pudiera alimentarse en el marco del Ramadán.

El futbolista que protagonizó el hecho fue el defensor Moussa Niakhate del Mainz, que a los 65 minutos de partido le solicitó al árbitro Matthias Jöllenbeck permiso para comer, ya que se había escondido el sol y durante el día del encuentro estaba en pleno periodo del Ramadán.

En el Ramadán, los creyentes solo pueden beber y comer al amanecer o una vez que el sol se esconde. Por eso Niakhate pidió permiso y le fue concedido.

“Jöllenbeck pasará a la historia de la Bundesliga como el primer árbitro en darle a un jugador musulmán un descanso para beber poco después de la puesta del sol para que pudiera romper su ayuno y comer”, explican en el medio Deutschlandfunk.de.

Si bien el hecho ocurrió el miércoles pasado, todavía se habla del tema y sobre si debe haber una regulación al respecto. Al menos en este caso no hubo reclamos ni molestia entre los jugadores y los cuerpos técnicos.

El futbolista del Mainz tomó dos botellas con la ayuda del arquero Robin Zentner y siguió jugando. Antes de reiniciar le encuentro, Niakhate le dio las gracias al árbitro por permitirle alimentarse.