Dinamarca disputa su segundo partido en la Eurocopa, esta vez ante Bélgica en Copenhague, en una jornada marcada por múltiples homenajes para el accidentado Christian Eriksen.
Al inicio del encuentro, el capitán de Bélgica, Jan Vertonghen, le entregó una camiseta en un cuadro al capitán danés como homenaje al número 10 de los locales, que en el debut en la Euro sufrió un paro en pleno partido.
El líder de los belgas también fue compañero de Eriksen, cuando ambos militaban en el Tottenham Hotspur, antes de que el danés se fuera al Inter de Milan.
Pero ese no fue el único episodio emotivo que se vivió durante el partido en el Parken Stadion de la capital danesa. Cuando el reloj marcó los 10 minutos de juego, el partido se detuvo para aplaudir al crack del Inter de Milan.
Árbitros, hinchas y jugadores de ambos equipos adhirieron y se mantuvieron aplaudiendo a Eriksen, que se está recuperando del accidente de salud que sufrió la semana pasada.
A estas muestras de respeto y apoyo también se sumaron varios lienzos del público y una camiseta gigante con el dorsal y nombre del afectado en la previa del encuentro.
Este es el segundo partido de ambas selecciones en la cita continental.
