Un remate furioso que hizo soñar al Barcelona por algunos minutos. Eso consiguió este miércoles la principal figura del FC Barcelona, Lionel Messi.

La ‘Pulga’ se hizo presente en el marcador con un tiro de media distancia que dejó sin chances al arquero del PSG, Keylor Naves.

Barcelona venía de sufrir el gol de Mbappé minutos antes, pero el rosarino paralizó a todos con su golazo de más de 30 metros.

Eso sí, el argentino después se convertiría en villano. En los descuentos del primer tiempo falló un penal que pudo haber impulsado más a sus compañeros.

Navas tuvo venganza, evitando el tanto que le pudo haber dado la ventaja a los ‘culés’.

Consignemos que el duelo acabó empatado 1 a 1, lo que significó el pase de los parisinos a cuartos.