La noticia de que Diego Maradona será sometido a una cirugía puso en alerta al mundo fútbol.
La preocupación se originó en Argentina y se extendió al resto de los países. Sin embargo, ¿Qué tan complicada es la intervención que se realizará el ídolo argentino?
En palabras del médico neurocirujano Patricio Besasso a Perfil, se detalla el hematoma subdural crónico como “pequeñas venas que sufren una ruptura en la superficie del cerebro, pasa desapercibido y el hematoma con el tiempo progresa por la propiedad oncótica de la sangre que atrae líquido”.
“Se da entre la duramadre y el cerebro, y se pueden presentar por traumatismos de cráneo, algunos banales o por una desaceleración brusca, y se presentan en la parte externa del cerebro muchas veces en pacientes anticoagulados o antiagregados”, agregó.
En cuanto a síntomas, Besasso especificó que “al principio el paciente puede sentir dolor de cabeza u obnubilación y hasta movimientos realentizados, incluso puede tener reacciones un poco más lentas y trastornos psiquiátricos”.
Tratamiento y posoperatorio
El especialista hizo hincapié en que “el tratamiento a seguir es el drenaje a través de dos agujeros de trepano e incluye un lavado del espacio subdural y luego dejar un drenaje para evitar que la sangre vuelva a formarse”.
“Si bien la operación no es compleja, se le realiza al paciente dos ‘agujeritos’, y se lava con solución fisiológica, para que el drenaje permita que el cerebro se expanda y se pegue a la tabla interna”, acotó.
¿Y qué viene después? El médico puntualizó que “en general, el posoperatorio demanda dos días de internación en terapia intensiva, ya que a veces ingresa un poco de aire luego de la hematoma y eso debe reabsorberse”.
“Los pacientes no pueden viajar en avión por tres meses, no se puede agachar ni hacer movimientos bruscos, pero sobre todo primero hay que resolver el tema de la coagulación, ya que suprimir la anticoagulación también puede sufrir sus riesgos”, remató.
Finalmente, Patricio Besasso sostuvo sobre la cirugía que “técnicamente es algo sencillo, pero siempre una intervención quirúrgica conlleva el riesgo de una operación. Lo que se espera es que el cerebro se reexpanda y resolver la hipertensión endocraneana”.
