La justicia suiza informó este jueves que había inculpado al presidente del París Saint-Germain y del grupo televisivo beIN Media, Nasser Al Khelaifi, y a Jérôme Valcke, exnúmero dos de la FIFA, en un caso de corrupción vinculado a la atribución de derechos televisivos del Mundial de fútbol.

En un comunicado, la oficina del fiscal general suizo (MPC) dijo haber inculpado a ambos dirigentes “en el contexto de la atribución de derechos mediáticos de diferentes Copas del Mundo de fútbol y Copas Confederaciones de la FIFA”.

El MPC acusa a Valcke de “corrupción pasiva, de gestión desleal múltiple y de falsificación de documentos”, mientras que Al Khelaifi y otro hombre, activo en el mundo de los derechos deportivos pero cuyo nombre no ha sido desvelado por la justicia suiza, están acusados de “instigación a la gestión desleal cometida” por el exsecretario general de la FIFA.

Según el MPC, Valcke utilizó, entre 2013 y 2015, su influencia como secretario general de la FIFA “para influir en favor de socios mediáticos de su preferencia en los procesos de asignación de derechos televisivos, para Italia y Grecia, de varias Copas del Mundo de fútbol y Copas Confederaciones de la FIFA en el periodo de 2018 a 2030”.

La investigación desveló, explica el MPC, que Valcke obtuvo beneficios indebidos de los dos coacusados. El exnúmero dos de la FIFA también logró, según la justicia suiza, el reembolso de un depósito de cerca de 500.000 euros que había transferido a terceros por una villa en Cerdeña, luego de la compra de la villa por Al Khelaifi, a través de una sociedad.

Valcke luego obtuvo de Al Khelaifi el derecho de disfrute exclusivo de la villa por un periodo de 18 meses en total -hasta su suspensión de la FIFA- sin tener que pagar su alquiler, estimado entre 900.000 y 1,8 millones de euros.

Para el abogado suizo de Al Khelaifi, Grégoire Mangeat, contactado por la AFP, “lo más importante es que todas las acusaciones de corrupción privada relativas a la concesión de los derechos televisivos han sido abandonadas (contra su cliente). Estas acusaciones, rebatidas desde el primer día, no eran sólidas”.

“Estoy satisfecho de que todas las acusaciones de corrupción en relación con las Copas del Mundo de 2026 y 2030 hayan sido abandonadas”, reaccionó Al Khelaifi en un comunicado. “Aunque sigue habiendo una segunda acusación técnica, estoy convencido de que se demostrará que no tiene fundamento”, añadió el presidente del PSG.